Ocho manadas cruzan el límite entre Cantabria y Castilla y León
Esta temporada, con 113 autorizaciones en la Comunidad, se llevan abatidos 40 ejemplares
Ocho manadas cruzan el límite entre Cantabria y Castilla y León-ICAL
El lobo ya no es una especie en peligro de extinción como lo era en los años 70 y como denunciara Félix Rodríguez de la Fuente. Por su gran capacidad de colonización, se considera que se encuentra en un estado de conservación favorable según la última evaluación de la Agencia Europa de Medio Ambiente que fiscaliza la aplicación del artículo 17 de la Directiva Hábitat.
En España hay 2.800 ejemplares, según algunas estimaciones, aunque las más conservadoras hablan de 2.000. El cálculo depende de los integrantes que se asignen a cada grupo de lobos.
En Cantabria se tienen cuantificados 23 grupos de lobos, 19 seguros y ocho compartidos con otras regiones. Según datos de la Consejería de Medio Ambiente, hay censados 171 ejemplares. De los grupos que cruzan las fronteras autonómicas hay constancia de dos compartidos con Asturias, uno con León, tres con Palencia y dos con Burgos.
El lobo se encuentra prácticamente arrinconado en el cuadrante noroeste del país, con ‘islas’ en Castilla-La Mancha y Andalucía en donde sigue presente. Pero se le puede considerar desaparecido en el Levante, incluido Cataluña y Navarra.
Castilla y León, por su posición geográfica, actúa como tapón para evitar la proliferación de la especie al sur y al este. La línea la establece el Duero, pero las regiones que ya no conviven con él se encuentran con la sorpresa de que la variante italiana del lobo está cruzando los Pirineos y activa las alarmas de los ganaderos.
En Castilla y León, según los últimos datos disponibles, solo en el año 2017 fueron abatidos 303 ejemplares, 143 de ellos fueron cazados, otros 30 atropellados y 130 fueron muertos por furtivos y envenenamiento. Si se reduce el cálculo a los ejemplares abatidos de manera programada, 2017 se saldó con 82 muertes y 2016 con otras 91, pero en esta dinámica el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León tumbó el plan establecido desde 2016 y condenó a la administración a pagar 1,6 millones por las muertes de lobos.
Según los últimos datos actualizados por la Consejería de Medio Ambiente, y después de que en la temporada 2018-2019 no se cazara, en la de 2019-2020, la actual, con el Plan vigente, se han cazado ya 40 lobos, sobre un total de 113 autorizados del nuevo Plan.
Otras autonomías
En Cantabria, entre 2008 y 2018 fueron abatidos 243 ejemplares, oficialmente, 82 en batidas de jabalí en donde estaba permitido cazar lobos, 142 en controles poblacionales autorizados y un 19% víctimas de batidas de cazadores.
En Asturias hubo un intento de establecer la catalogación del lobo como especie cinegética en 2018. Fue un compromiso del PP, que contó con el apoyo de Foro. No prosperó. Ahora gobierna el PSOE, lo que no obsta para que haya un programa de gestión 2019-2020, que prevé controles de población allí donde la presencia de estos cánidos comprometa la viabilidad económica de las explotaciones. El programa de actuaciones asturiano para 2019-2020 establece un cupo máximo de ‘extracción’ de 42 ejemplares. En 2018 había contabilizadas 40 manadas en el Principado.
País Vasco tiene una postura beligerante contra el lobo para bloquearle el paso, mientras lo tiene teóricamente protegido; mientras en Galicia, que tiene 84 manadas contadas y cuenta con un Plan de Gestión, los ganaderos y cazadores presionan a la Xunta para que organice más batidas.