Un accidente destroza el puente romano de Cabezón y manda tres metros de piedra al río

El puente romano de Cabezón de Pisuerga sigue en espera de ser jubilado para el paso de tráfico rodado, pero, entre tanto, no cesa de sufrir destrozos por culpa de los accidentes de vehículos . El último, en la tarde del sábado, cuando el conductor de un Citroën C5 ha chocado contra el muro, derribando cerca de tres metros de piedra, según informaron testigos del suceso.

El siniestro se ha producido a las 18.10 horas. El turismo, en el que solo viajaba el conductor, circulaba en dirección a la A-62, que es la salida del casco viejo del municipio, en un momento de intensa lluvia. En un momento dado, el coche se deslizó y no pudo controlarlo. “¡Se me ha ido!”, “¡Se me ha ido!”, llegó a exclamar el conductor tras choque, según relataron a este diario testigos de la colisión. El varón, vecino de Cabezón, resultó ileso.

Como consecuencia del impacto, tres metros de piedra del muro se cayeron al río, y e l coche tuvo que ser retirado con grúa con importantes daños en la parte delantera. En lo que se refiere solo al turismo, fue algo menor para lo que pudo pasar, ya que el coche se quedó con una rueda en el aire. Al instante llegó al lugar una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico y el equipo de atestados. También se personaron operarios de Conservación de Carreteras.

El siniestro se produce justo un mes después de que la Junta de Castilla y León anunciase la contratación a una empresa de Cantabria el diseño del nuevo puente . Para hacer este trabajo, que tiene un presupuesto de 94.000 euros , dispondrá de diez meses. El coste del nuevo viaducto se ha cifrado en 7 millones de euros.La fecha para que se pueda ‘cortar la cinta inaugural’ del futuro paso aún se vislumbra lejana, pues no está previsto que la obra se termine hasta el segundo semestre del año 2028.

La encargada de dibujar el puente será la empresa ‘Arenas & Asociados, Ingeniería de Diseño’, afincada en Santander y especializada en el diseño de puentes, por alzarse como la propuesta con mejor puntuación de todas las que se recibieron. Ocho, en concreto, presentaron ofertas. Finalmente, la sociedad limitada profesional cántabra llevará a cabo el prototipo del nuevo viaducto para que por él pueda circular el tráfico rodado –800 vehículos diarios, calcula la Junta– y así el medieval quede exclusivamente para uso peatonal. 

Una vez realizado este trámite restaría, por tanto, la fase definitiva, que es la construcción del viaducto en sí, con un trazado que da continuidad al camino del Monte y al de Valdealfonsa hasta llegar río para, desde allí, construir un tramo de carretera en paralelo hasta decidir en qué punto exacto se ubica el puente para después conectar la otra orilla con la VP-3402 y, a través de dicha vía, acceder ya a la autovía A-62.

Según el calendario previsto por el Ejecutivo –si no hay retrasos– en el primer semestre del próximo año la Junta podría sacar a licitación las obras de construcción del nuevo paso de Cabezón de Pisuerga y en torno a junio de 2025 tendría seleccionada a la empresa que lo ejecute. 

A partir de entonces los trabajos se prolongarían hasta el segundo semestre de 2028, que es cuando calculan que el viaducto sea una realidad. En esa fecha habrán transcurrido trece años desde de que se derrumbara uno de los muros de contención del histórico paso, y que supuso el detonante definitivo para que la Administración regional se planteara erigir otro paso en esta localidad del alfoz, que llevaba ya tiempo reclamando que se prohibiera el tránsito de vehículos como había ocurrido, por ejemplo, en Simancas.

Es ahora cuando se le está dando el empujón que le acerca a la recta final , después de numerosos episodios de remiendos en el puente histórico, para reparar unos desperfectos que incluso han llegado a poner en riesgo su estabilidad. Hace poco más de un año, de hecho, un informe del Servicio Territorial de Fomento de Valladolid alertaba del «grave riesgo de desplome parcial del viaducto» y de «derrumbe súbito» de la plataforma, después de observar una grieta de «gran profundidad». 

La memoria urgía a una intervención inmediata para consideraba «muy probable el colapso de la zona afectada». Para reparar estos últimos daños la Junta inyectó 1,3 millones de euros por la vía de emergencia y el paso quedó cortado casi cuatro meses para el tráfico rodado y algo menos para los viandantes.

También estuvo cortado al tránsito vehículos y de peatones entre junio y diciembre de 2015, después de que un muro de contención se viniera abajo la tarde de San Juan. Su reparación se cifró en casi un millón de euros. 

Desde entonces los vecinos de Cabezón y los diferentes equipos de Gobierno municipal no han cesado en sus reivindicaciones para exigir a la Junta de Castilla y León que construya un paso para vehículos sobre el Pisuerga, en aras de preservar el puente de origen medieval.