Un millar de vecinos reclama al Ayuntamiento continuar la integración ferroviaria en Valladolid
La Plataforma por la Integración Ferroviaria afirma que la negativa de continuar el proyecto costaría una deuda de "más de 400 millones" y la pérdida del paso de Ariza

Imagen de archivo de la vía de Ariza a la altura de la estación
Más de un millar de vecinos de 45 barrios de Valladolid ha enviado en cuatro días una reclamación oficial al Ayuntamiento de la capital para que continúe con las obras de la integración ferroviaria y así evitar que condene a la ciudadanía a una deuda de "cientos millones", con la disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad.
La Plataforma por la Integración Ferroviaria de Valladolid se hizo eco la semana pasada de la "gravísima" noticia de que el Ministerio de Transportes iniciará la disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad si el Ayuntamiento, en el próximo consejo de administración de septiembre, no aprueba la licitación de los pasos de Ariza. "La irresponsabilidad del equipo de gobierno de PP y Vox nos ha conducido al borde del abismo y al desastre. Su bloqueo sistemático a las obras de integración, usando como excusa la quimera de un soterramiento que saben imposible, está a punto de costar a Valladolid la pérdida definitiva de todo el proyecto y una deuda de más de 400 millones de euros que pagaremos todos los vecinos", aseguró.
A su juicio, la disolución de la sociedad es el fin y significa "tirar a la basura" años de trabajo y decir adiós "para siempre" no solo a los pasos de Ariza, sino también al paso de Unión-Pelícano y a cualquier futura obra de permeabilidad. "Supone perpetuar la brecha que divide nuestros barrios y renunciar a una solución ya en marcha. Todo por la soberbia y el electoralismo de un equipo de Gobierno que prefiere vender la quimera de un proyecto inviable antes que ejecutar las obras que la ciudad necesita urgentemente", añadió.
La Plataforma lamentó la estrategia del Ayuntamiento, que escudado en excusas como un supuesto caos de tráfico sin informes técnicos que lo avalen, o afirmando que "no es el momento", los señores Carnero y Zarandona han puesto "en jaque" el futuro de Valladolid. "Su negativa a avanzar es una traición a los vallisoletanos y un desprecio absoluto al interés general", precisó
Por todo, consideró que el momento de "alzar la voz" y exigir al Consistorio que abandone su "rumbo suicida", y que, en la reunión de septiembre, apruebe "sin más dilación" la continuación de las obras de integración. "Es la única solución real, la única posible", concluyó. Es por ello que la Plataforma ha habilitado una página para poder mandar una queja al Ayuntamiento de forma oficial. "Deben sentir la presión de una ciudad que no está dispuesta a renunciar a su futuro. O integración, o el desastre. No hay más alternativa", sentenció.