Un interno golpea en la cabeza con una barra metálica a un funcionario en la prisión de Burgos

Un interno golpeó en la cabeza con una barra metálica a un funcionario en el centro penitenciario de Burgos el pasado domingo, 9 de septiembre, en el turno de mañana según denunció hoy la secretaria general de CCOO en Instituciones Penitenciarias, Silvia Fernández García, a través de un comunicado de prensa. Según relató, el interno se encontraba ubicado en el departamento de Celular cuando le golpeó la cabeza a un funcionario con la barra metálica de una mancuerna que cogió del gimnasio.

Así, según Fernández “mientras el personal intentaba aislar el incidente desalojando la galería, un grupo de internos secundaba un plante, desobedeciendo, increpando y amenazando de forma colectiva la orden de desalojo dada por los funcionarios, con la tenencia de un pincho carcelario, lo que ha comprometido seriamente la seguridad de este centro penitenciario”. Sin embargo, destacó que “la profesionalidad del personal penitenciario impidió que sucedieran hechos de mayor gravedad”, a la vez que lamentó que como consecuencia de la agresión el trabajador se encuentra de baja laboral, informa Ical. 

En este sentido, recordó que CCOO viene insistiendo que la situación de la prisión de Burgos es “insostenible” por “la grave carencia de personal, el envejecimiento de la plantilla y una clasificación de internos completamente inadecuada, que permite que episodios de violencia contra el personal y la seguridad del establecimiento puedan extenderse como ha sucedido en esta ocasión”.

Por ello, dijo, desde CCOO se viene denunciando “el alto número de agresiones que sufre el personal penitenciario, lo que ha provocado que Instituciones Penitenciarias tenga la tasa de siniestralidad más elevada de la Administración General de Estado, con el 90 por ciento de las agresiones físicas, sin que consten en este dato oficial la violencia verbal, o la psicológica puesto que la Administración ni tan siquiera las considera agresión”.

“Las agresiones en prisión son un problema estructural, con múltiples causas y factores de riesgo. Entre las causas fundamentales se encuentra la falta de personal, el incremento de la población reclusa con patologías psiquiátricas, una deficiente clasificación regimental o la falta de medios y de formación continua y permanente”, manifestó.

Falta de personal

Asimismo, incidió en que CCOO viene denunciando la “situación alarmante” de falta de personal que tiene en el Centro Penitenciario de Burgos. En este momento cerca del 40 por ciento de plazas del personal de vigilancia interior están vacantes, expuso, debido al problema del envejecimiento de esta plantilla, lo que implica “que se tenga un número muy elevado de funcionarios que están en la situación de segunda actividad o próximos a optar a ella, circunstancia determinante del aumento de las agresiones”.

Por ello, desde CCOO demandan una oferta de empleo público extraordinario y la negociación de un protocolo de prevención eficaz frente a las agresiones al personal penitenciario, así como que se incrementen los programas de tratamiento y prevención dirigidos a la población reclusa más peligrosa. Finalmente, CCOO se solidarizó con el compañero agredido y le deseó una pronta recuperación, recordándole a la Administración que “cumpla con la obligación legal que tiene de velar por la seguridad y salud de sus trabajadoras y trabajadores penitenciarios”.