El PP busca concejales para mantener Quintanilla
Tras la renuncia del alcalde y del teniente de alcalde, todos los miembros de la lista del partido han presentado su renuncia salvo el actual alcalde en funciones
Quintanilla de Onésimo busca el tercer alcalde en esta legislatura después de que el pasado 12 de octubre el actual representante del Ayuntamiento, Raúl Piquero, y el teniente de alcalde, Juan Manuel Recio, dimitieran, dejando dos vacantes en el Partido Popular que no han sido ocupadas por ninguno de los 12 miembros iniciales de la lista, excepto por el que hasta ahora era segundo teniente de alcalde, David Redondo, que hasta la celebración del próximo pleno se ha convertido en alcalde en funciones de la localidad.
El PP se queda así con un representante al frente del partido y busca dos concejales antes del pleno que debe ser celebrado como tarde el 27 de octubre y donde se determinará quién es el tercer alcalde de la legislatura. Completar las dos vacantes es una labor en la que ya está involucrado el partido, que ante la ausencia de candidatos del propio municipio, se optará por miembros de otras localidades.
Redondo insiste en que «lo ideal sería encontrar a dos ciudadanos del pueblo involucrados que conocen la situación, en vez de a dos personas de fuera», pero los plazos se acaban y el jueves 27 de octubre los dos nuevos ediles del Partido Popular, tendrán que tener la aprobación de las credenciales por la Junta Electoral al no estar en las listas previamente.
La complejidad de la gobernabilidad del municipio va más allá, ya que las elecciones de mayo de 2015 configuraron la política de Quintanilla de Onésimo con tres concejales para el PP, tres para el PSOE y tres para Ciudadanos. Máxima igualdad que comenzó con un gobierno del Partido Popular en solitario gracias al voto de favor de la lista más votada y con dos dimisiones en la alcaldía, la primera la de Félix Redondo a los tres meses por motivos laborales y ahora la de Raúl Piquero por problemas de salud.
El portavoz de Ciudadanos en Quintanilla, Juan Moreno, considera «imprescindible lograr un pacto con uno de los dos grupos, y si puede ser con los dos mejor, para tener al menos un 60% de los apoyos» y conseguir dar «estabilidad» a la política municipal. «Está muy claro que la composición de fuerzas del municipio hace muy difícil que uno solo vaya por libre», explicó el portavoz de la formación naranja, quien recordó, que ya en dos ocasiones respetaron la lista más votada, algo que ahora «no es el caso» al solo quedar un integrante de esa lista.
Desde el PSOE, su portavoz, Carlos del Barrio, confesó estar «abiertos a todas las posibilidades» siempre y cuando sean beneficiosas para el pueblo. Sin embargo, se mostró reacio a pactar con los populares, actual partido del gobierno. «Estamos expectantes, tenemos que ver cómo intentamos que la gobernabilidad del Ayuntamiento sea estable y por lo menos dure el alcalde hasta el final de esta legislatura».
Los tres grupos políticos del municipio apenas han entablado conversación sobre posibles pactos, lo que sí que muestra, al menos desde Ciudadanos y PSOE, es interés por ver qué pasará con los dos concejales que faltan en el Partido Popular. «Primero tenemos que ver cuantos concejales hay en el pueblo y después tenemos unos días para concretar cosas e ir hablando», aseguró Moreno. Además, se estima que las credenciales de los ediles populares tardarían entre 10 y 15 días, un periodo muy superior al pleno del próximo 27 de octubre