La calle Regalado de Valladolid será sólo para peatones a partir del 16 de junio

La calle Regalado, en pleno centro de la ciudad, se incorporará el próximo 16 de junio a la lista de vías peatonales de Valladolid. Ese día se cerrará al tráfico de vehículos, que sólo podrán acceder hasta las once de la mañana para labores de carga y descarga.

La peatonalización de Regalado es una petición de la Asociación Vallisoletana de Comercio, Avadeco, por estar en una zona de gran tradición comercial a la que el Ayuntamiento accede tras sopesar el impacto que puede tener en el tráfico.

«Nos lo habían pedido los comerciantes y nos parece bien», afirma el concejal de Seguridad y Movilidad, Luis Vélez, convencido de que el cierre para los vehículos no va a suponer un problema importante en una calle que «ahora no tiene mucho tráfico». Por contra, confía en que la decisión contribuya «a revitalizar la zona», además de «ganar espacio para los peatones» en una vía muy transitada por los ciudadanos y con aceras estrechas que obligan a menudo a los viandantes a bajar a la calzada. En el caso de que la medida no surta el efecto deseado de impulsar la vida comercial no se descarta dar marcha atrás, pero para comprobarlo tendrá que pasar un tiempo prudencial.

A partir del 16, los vehículos procedentes de la calle Cánovas del Castillo ya no podrán girar a la derecha por Regalado, en dirección a Duque de la Victoria. La única alternativa será continuar por la calle Fray Luis de León para llegar a López Gómez y proseguir hasta la plaza de España para poder incorporarse a Duque de la Victoria.

La peatonalización, adelantada ayer por EsRadio Valladolid y confirmada por Vélez, no implicará, sin embargo, obra alguna. La calle se mantendrá como está ahora, con la diferencia de que a partir de ese día los peatones también podrán caminar por la calzada sin temor a los coches.

Vélez recalca que la medida no tendrá coste económico alguno al ser una calle «que se urbanizó no hace muchos años» y no requiere por el momento la renovación del pavimento.

Como en el resto de la ciudad, también en la calle Regalado los años de la crisis pasaron factura y hubo comercios que echaron el cierre. Conectada con otra de las calles comerciales por excelencia de la ciudad, Teresa Gil, también peatonal, la medida, más allá de facilitar la movilidad peatonal en el centro de la ciudad, tiene como objetivo recuperar el pulso comercial.

El presidente de Avadeco, Alejandro García Pellitero, también espera que el cierre al tráfico contribuya a la apertura de los comercios que ahora están cerrados. «Va a crearse un gran eje peatonal desde la catedral hasta la calle Santiago», señala y añade que, además de no tener que meter «el pico y la pala» tampoco se perderán plazas de aparcamiento dado que las únicas que hay en la calle son de residentes.

En el caso de que el resultado sea el que se espera, la calzada se elevará para que esté al mismo nivel que las aceras.