La federación provincial de Ampas cesa su actividad por la "continua presión" de la Consejería

La Federación Provincial de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado de Centros Públicos de Valladolid (Fapava) anunció esta tarde su cese de actividad institucional por el “cansancio” y la “continua presión” a la que se ha visto sometida por parte de la Consejería de Educación para justificar unas subvenciones. Una decisión que supondrá que Fapava deje de tener representación y participación en los órganos, las comisiones y los consejos relacionados con la educación. No en vano, la federación representa a 110 Ampas de centros públicos de Valladolid y provincia.

La presión, según explicaron sus portavoces, se remonta a abril del año pasado cuando la Consejería les comunicó la puesta en marcha del control financiero permanente para reclamar documentación que justificara las subvenciones correspondientes al curso 2009-2010. Una documentación que ya se había entregado en dos ocasiones anteriores y que, entonces, fue aceptada.

La presidenta de Fapava, María José Gómez, explicó esta tarde a las puertas del instituto Julián Marías de la capital que la federación, compuesta por voluntarios interesados en la participación, no está para solucionar la falta de gestión de la Consejería. Pero el control llevado a cabo por Educación se ha extendido a todas las provincias, por lo que Fapava no descarta que otras federaciones sigan el camino emprendido en Valladolid. “Algunas federaciones quieren cesar pero sin levantar la voz como nosotros”, explicó el tesorero Guillermo Martín.

Represión

El comunicado facilitado por Fapava es aún más duro porque acusa a la Consejería de una actuación “mezquina”, “miserable” y “represora ante quien no se comporta de forma dócil y colabore en su autobombo”. Martín lamentó que este ceso es el “tanto de despedida” que se apunta el consejero Juan José Mateos, que hace unos meses ya anunció su salida de la política. No en vano, le hacen responsable directo de la desaparición de a federación de Valladolid.

María José Gómez añadió que “nos atan de pies y manos y, al final, minan la participación de padres y madres”. Pese a eso, aseguró que Fapava continuará con su trabajo desde las bases y con su ayuda a las diferentes asociaciones para coordinar su papel y exigir lo mejor para sus hijos.

Gómez reconoció que nunca hubieran deseado cesar su actividad institucional pero confesó las dificultades para encontrar documentación de hace cuatro años, que ya fue solicitada en dos ocasiones, lo que demuestra que la Consejería “se ceba con el más débil”.

Y eso que la hasta ahora presidenta de Fapava aseguró que “no queremos ni tenemos nada que ocultar” pese a que las cantidades reclamadas por la Junta ascienden a 2.100 euros más 400 euros en concepto de intereses. “Estamos por la escuela pública y no para justificar y rejustificar todas las subvenciones”, declaró. “Es vergonzoso que con los recortes que han hecho en educación, nos reclamen esas cantidades irrisorias”, sentenció. Además, recordó que las últimas subvenciones a las federaciones de Ampas fueron en el curso 2010-2011, que coincidieron con un año electoral.

Concluyó que la Consejería sabe “perfectamente" el destino del dinero como la formación de los padres, las actividades y las infraestructuras y el funcionamiento de la federación. Pese a ello, denuncian que la Junta llegó, incluso, a solicitar facturas de los sellos.