ALPINISMO / MONTAÑEROS VALLISOLETANOS
La vida se ve mejor desde arriba
El club más longevo de la provincia cumple 56 años con buena salud y ganas de alcanzar metas más altas / Ronda los 350 asociados y dispone de una casa-refugio y un rocódromo

Varios componentes del Club Montañeros de Valladolid posan con la bandera en la cima Peña Prieta en la Cordillera Cantábrica.-EL MUNDO
El camino de la montaña, como el de la vida, no se recorre con las piernas sino con el corazón. Un corazón que lleva 56 años latiendo en el pecho de los Montañeros Vallisoletanos. El club se inscribió oficialmente en el año 1961, aunque años atrás ya «un grupo de amigos» ya comenzó a fraguar la idea. La fusión con otros grupos existentes hizo que consiguieran la tarjeta federativa para federarse. Y así llegó la primera salida hace 50 años, que se hizo en autocar, al Circo de Gredos.
Desde entonces, como es su sino, el club ha ido ascendiendo y sin tener cota. Actualmente tiene unos 350 socios y en su sede se organizan jornadas de formación técnica para los socios, concentraciones de escaladores, marchas infantiles, etc.
Ramón Viloria es el presidente del club y cree que «acercar la montaña a la gente y disfrutar de ella con la seguridad de seguir siendo nuestra filosofía», comenta y se muestra agradecido que los vallisoletanos, «en la única provincia de España que no tiene montaña», muestren tantos interés por esta modalidad.
La seguridad sigue siendo la gran preocupación de los montañeros. De ahí que sea obligatorio en todas las salidas, cursos o actividades la formación. «Lo que tratamos de enseñar es que el excesivo pulular de la gente no nos haga olvidar la faceta de la seguridad. Hay un riesgo importante, ahora sube más gente y está menos preparada». De ahí que Viloria aprovecha para pedir a los aficionados al montañismo que se federen para tener «mayores garantías» respecto a un posible rescate.
El presidente asegura que consideran su actividad «un deporte», aunque no tengan competición. Excepto en varias pruebas que se realizan en el rocódromo con los más jóvenes. Yes que comenta que el ascender en indoor se ha convertido en una rica manera de conseguir cantera. Aunque reconoce que la mejor publicidad es el boca a boca y la herencia de padres a hijos.
Con 56 años y a punto de llegar a 57, Viloria cree que la salud del club «es buena» y pone de ejemplo el ver que cada quince días el autocar rumbo a la montaña se suele llenar, aunque cree que se debería hacer más publicidad entre los jóvenes. Además comenta que este club ha servido como punto de amistad para muchos socios. Y es que el subir a cotas por encima de los 2.000 metros de la mano, une más que cualquier otra cosa.
De lo que más orgullo se muestra de cómo la conciencia ecológica ha evolucionado en este más de medio siglo. «Estamos más concienciados en cuanto a limpieza y medio ambiente, somos conscientes de que para volver hay que cuidarlo», expone.
La actividad de Montañeros Vallisoletanos es anual. Por ejemplo en septiembre realizan una ‘Semana de la Montaña’ donde suelen venir a Valladolid primeras ‘espadas’ de este deporte como Carlos Soria o Juanito Oiarzabal, presente este año.
También jornadas de Iniciación a las Técnicas de Orientación, algo obligatorio si se quiere salir a la alta montaña y rutas de senderismo por la provincia, que tienen muchos adeptos.
Además, el ser socio del club permite poder disfrutar de un ‘refugio’ ubicado en la población de Liegos (León). El refugio consta de un salón-comedor con estufa, que nos permite mantenernos calientes en los fríos inviernos, una cocina con agua corriente, cuarto de baño, estanterías para guardar las mochilas, botas y material de montaña. Y dos habitaciones con literas, donde dormir y descansar tras la jornada de montaña. Ideal para ‘desconectar’ de todo.