Ascenso sin revolución
El club dedicará la mayoría de sus ingresos en Primera a neutralizar los 25 millones de deuda, pues confía en el grueso de la plantilla / La previsión es que continúen 16 jugadores
Los jugadores delRealValladolid festejan el ascenso en el ‘Leyenda delPisuerga’.-MIGUEL ÁNGEL SANTOS
Un club de fútbol es como un gran aeropuerto: está abierto las 24 horas. El Real Valladolid nunca ha parado de trabajar en la confección de su plantilla 18-19. La única variación es que ha tomado dos líneas de trabajo: continuar en Segunda o ascenso.
Por suerte y por trabajo se ha dado la segunda, y ahora se abre un gran interrogante. ¿A qué se dedicarán los casi 50 millones de ingresos de la próxima temporada? El deseo del presidente es quitarse de encima y de un plumazo la deuda pendiente, que ha disminuido a los 25 millones, buscando incluso acuerdos de quita con los pequeños acreedores. Esto le dejaría un menor margen a la hora de reforzar la plantilla para la élite.
La visión de sus colaboradores cercanos va más por una faceta mixta: pagar una buena parte de la deuda, pero no toda, dedicando una cantidad mayor al gasto en plantilla, con el fin de atar en la medida de lo posible, pues el fútbol no son matemáticas, la posibilidad de una plantilla competitiva, en la búsqueda de la permanencia.
En los próximos días se evaporarán las dudas, pero lo que tienen muy claro en la Avenida del Mundial 82 es que no habrá síndrome de nuevo rico, en forma de revolución en la plantilla.
El club cuenta con 16 jugadores del plantel actual, tras pasar los filtros de la dirección deportiva y el entrenador. Sergio sabe que el fuerte de sus jugadores es que forman un equipo coral. Una revolución rompería una identidad de grupo ganador, cualidad sumamente importante, como han demostrado Leganés o Girona.
Reducir el número de fichajes supondría también cambiar cantidad por calidad. El club prefiere que lleguen menos futbolistas a un precio mayor, que cambiar muchas piezas por menos dinero y que los nuevos apenas marquen diferencias con jugadores que sí creen y viven esta camiseta. El movimiento comienza hoy.