Diario de Valladolid

Cesan el gerente de Nevasa tras la polémica por el contrato de suministro de flores

El PP lo tacha de «cortina de humo» y reitera que el concurso estaba «prácticamente determinado»

La concejala María Sánchez y el ya ex gerente de Nevasa, José Luis Burgos, en el Ayuntamiento.-E. M.

La concejala María Sánchez y el ya ex gerente de Nevasa, José Luis Burgos, en el Ayuntamiento.-E. M.

Publicado por
Fernando Martín
Valladolid

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La polémica por la adjudicación del contrato para el suministro de flores en los cementerios municipales de Valladolid culminó ayer con el cese del gerente de la empresa Nevasa, José Luis Burgos, al frente desde hace años de la sociedad que gestiona las necrópolis del Carmen, Las Contiendas y Puenteduero.

Ferrovial, la empresa que ostenta la potestad en materia de personal en Nevasa, pese a tener una participación del 49% frente al 51% del Ayuntamiento, accedió a la petición de la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, de cesar a Burgos por un incumplimiento muy grave de la Ley de Contratos del Sector Público y el consejo de administración celebrado ayer ratificó la decisión, que tiene un efecto inmediato.

Ahora, ambas partes, Ferrovial y el Ayuntamiento, establecerán las bases para la elección de la nueva gerencia, que la concejala de Medio Ambiente pretende que sigan el modelo utilizado en Aquavall, la empresa que se ocupa de la gestión del ciclo del agua. Sánchez dijo al final del consejo que había que actuar «con firmeza y decisión» ante «un caso tan grave» y se mostró confiada en que la nueva elección restituya «el buen nombre de una empresa participada mayoritariamente por el Ayuntamiento y que gestiona algo tan sensible como los servicios funerarios de los seres queridos».

La adjudicataria del contrato de suministro de adornos florales para los cementerios, por importe de 685.000 euros y con una vigencia de 5 años, fue Flores Mary, propiedad de la hermana de un trabajador del Grupo Socialista que fue jefe de gabinete del alcalde, una empresa que trabaja desde hace años con el Ayuntamiento y que también lo hizo durante el tiempo que el PP estuvo al frente de la alcaldía.

La polémica se suscitó al presentar un recurso del representante de la otra empresa que concurría, Jardinería Ruano, la adjudicataria anterior, acompañado de las conversaciones telefónicas mantenidas con el gerente antes de que se adjudicara el contrato, grabadas por el recurrente, en las que el ahora cesado preguntaba se interesaba por algunos aspectos de su oferta. Una circunstancia ésta prohibida en la normativa sobre contratos públicos.

Fue entonces cuando el Ayuntamiento anuló la adjudicación, pidió a Ferrovial el cese del gerente y convocó un nuevo concurso, esta vez telemático, que se resolvió el pasado 25 marzo y en el que volvió a ganar la misma empresa, Flores Mary, con la oferta más baja.

El propio gerente admitió luego que había cometido una «indiscreción», pero añadió que la conversación, en la que se desvelaban datos de la oferta de Ruano, no tuvo trascendencia ni repercusión alguna en la decisión final.

Un día antes de conocerse el nombre de la ganadora, el PP denunció la existencia de irregularidades en el primer proceso de adjudicación y mantuvo la sospecha sobre la existencia de presuntos intereses para que la adjudicataria fuera Flores Mary. La concejala de Medio Ambiente rechazó las insinuaciones y sostuvo que el proceso fue idéntico al seguido en 2014, con el concejal ‘popular’ Jesús Enríquez como presidente del consejo de administración de Nevasa, en el que la ganadora fue Jardinería Ruano.

Enríquez, miembro del consejo de administración de Nevasa, no asistió a la reunión de ayer por no estar «dispuestos a participar en un acto sumario de despido sin que previamente se les haya facilitado la documentación y propuesta y se les garantice que se cumplen los derechos que la legislación laboral contempla».

Para el Grupo Popular «este proceso de ejecución inmediata» es una «cortina de humo» para «tapar la verdad del asunto, que el contrato de las flores de Nevasa tenía prácticamente determinado su adjudicatario, algo que el alcalde intenta ocultar a toda costa».

Sánchez acusó a Enríquez de «tirar la piedra y esconder la mano» al no asistir al consejo y censuró también la ausencia de Ciudadanos. A ambos grupos les recriminó su «falta de responsabilidad».

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