VTLP lleva en su programa un plan contra la precariedad de los colectivos más vulnerables

Un plan integral contra la precariedad dirigido a los colectivos más vulnerables de la ciudad será una de las novedades del programa electoral de Valladolid Toma la Palabra, la formación que comparte tareas de gobierno con el PSOE en el Ayuntamiento.

Después de conocer el miércoles las propuestas de los socialistas para las elecciones, Valladolid Toma la Palabra culminó ayer, con una asamblea que se prolongó toda la mañana, un proceso de siete meses para elaborar su programa y marcar distancias con sus compañeros de gobierno municipal.

Toca ahora, después del trabajo conjunto de estos cuatro años, definir el territorio propio para evitar el mimetismo con los socialistas, una labor que el candidato de Valladolid Toma la Palabra a la alcaldía, Manuel Saravia, ve «fácil» con el ejemplo del trabajo realizado en las tres concejalías dirigidas por este grupo municipal: Urbanismo, con él de edil, Medio Ambiente, María Sánchez, y Participación Ciudadana, con Alberto Bustos a la cabeza.

Saravia considera que la aportación de Valladolid Toma la Palabra ha sido fundamental para contribuir al cambio político operado en estos cuatro años, pero añade que ahora toca profundizar más en esa transformación, tanto en materia de igualdad como de sostenibilidad, solidaridad y buen gobierno. Y para consolidar el cambio de rumbo, Valladolid Toma la Palabra se presenta a las elecciones municipales como la única formación con «la ambición política necesaria para liderar esa transformación», con independencia de su valoración «positiva» de los cambios «logrados de la mano de otras fuerzas políticas».

En esa línea de profundización del cambio va el plan contra la precariedad, que se desglosará en otros cuatro programas: ‘Plantando Caras y Cuerpos’, contra la feminización de la pobreza; ‘Sol/edades’, contra las nuevas soledades urbanas; ‘Ciudad Migrante’, para acompañamiento de personas migrantes, y programa ‘Horizonte Diversidad’, para dar visibilidad y apoyo a personas con capacidades diversas.

Este plan se incluye dentro del bloque de propuestas dirigidas a conseguir una ciudad más habitable, uno de los tres grandes ejes del programa electoral, que recoge también entre sus medidas la conversión del antiguo convento de Santa Catalina en «un laboratorio de cultura y arte», además de destinarlo a otros usos sociales.

La implantación en la ciudad de una zona de bajas emisiones para así reducir la contaminación es otra de las medidas previstas, actuación que pasa por reducir el uso del vehículo privado. En este mismo paquete de actuaciones, agrupadas bajo el lema ‘Valladolid con futuro’, Toma la Palabra plantea un proyecto denominado ‘Liliput’, con medidas destinadas «a fomentar la economía local a pequeña escala, con especial atención al pequeño comercio de proximidad y a la economía social», puede leerse en el avance del programa.

Y para avanzar en el proceso de participación ciudadana, una de las propuestas pasa por elaborar programas que dinamicen las plazas para crear lo que Toma la Palabra denomina «una constelación de ágoras». La recuperación de la fábrica de Santa Victoria para acoger asociaciones y entidades ciudadanas y del antiguo cuartel de San Quintín, ahora San Isidro, para convertirlo en un espacio dedicado a la cultura figuran también entre las iniciativas con las que Saravia y sus compañeros de lista se presentan a las elecciones.

El candidato de Toma la Palabra a la alcaldía se mostró convencido de que todas las propuestas que llevarán «pueden hacerse en cuatro años» y añadió que se han «tentado la ropa» para que sean posibles. «No es poner por poner», dijo Saravia. Con las enmiendas admitidas ayer, ahora se redactará el programa definitivo, que se presentará en público el próximo sábado.