La Virgen de los Pegotes se muda de noche a Nava

Nava del Rey celebra esta noche, como viene haciendo todos los 30 de noviembre desde hace casi tres siglos, la tradicional ‘Bajada de la Virgen de los Pegotes’. La imagen de la ‘Pura y sin mancha’, como la llaman los navarreses, se montará en un peculiar carruaje y la trasladarán, entre hogueras encendidas por la calle, desde su ermita titular, –la de Nuestra Señora de la Concepción–, a las afueras del pueblo, hasta el templo principal, la Iglesia de los Santos Juanes.

Por el camino, centenares de niños esperarán el paso de la comitiva con antorchas levantadas (los ‘pegotes’), para honrar a la ‘Estrella de la mañana’, como también la llaman en largas letanías llenas de alabanzas para la imagen secular. Esa es otra de las peculiaridades de la tradición, las alabanzas espontáneas de los vecinos, que detienen la procesión de cuando en cuando para proclamar decenas de vítores encadenados, en alta voz.

Pero por si fueran poco llamativas las hogueras, los ‘pegotes’ y el carruaje –en el que viajan, apretados en el asiento de atrás, tras la Virgen, el alcalde, el párroco y el descendiente de la familia que hace generaciones lo donó–, también son protagonistas las mulas que tiran del vehículo y, aún más, los ‘muleros’, ataviados al modo tradicional y fumando grandes puros.

El novenario de la Virgen de Los Pegotes, instaurado oficialmente por el Ayuntamiento de Nava del Rey en 1745, arranca hoy a las 19,00 horas con la llegada del coche procesional a la Casa Consistorial, donde recogerá a las autoridades. A las 19,15 llegará a la ermita, a la que suelen llamar ‘del Pico Zarcero’, de donde partirá la comitiva cuarto de hora después por la calle Salvador Carmona, hasta la parroquial de los Santos Juanes. La cosa terminará con degustación de castañas y vino en la Casa de Cultura.

La Virgen volverá del mismo modo a su ermita el 8 de diciembre.