Diario de Valladolid

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«Es denigrante pagar 40 céntimos a un paciente por el traslado a Salamanca»

Los sindicatos ven «vergonzosa» esta retribución por los 120 kilómetros recorridos para operarse de un cáncer / Sáez: «Es una regulación objetiva»

Sáez en Segovia con el gerente del Hospital General y el delegado territorial-Ical

Sáez en Segovia con el gerente del Hospital General y el delegado territorial-Ical

Publicado por
M. J. M
Valladolid

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Insultante», «vergonzoso», «ofensivo», «denigrante»... son sólo algunos de los adjetivos que, tanto el marido de una paciente como los sindicatos de Sanidad profieren sobre la compensación económica que una vallisoletana recibió por tener que trasladarse a Salamanca para tratarse de un cáncer: 120 kilómetros de distancia, 40 céntimos de retribución. A 0,003 euros el kilómetro.

Los hechos se remontan a septiembre del año pasado, cuando Pilar Sánchez, que padece cáncer, tiene que ser operada en el Hospital Clínico de Salamanca, porque en Valladolid no pueden tratarla, como denunció su marido, Teodoro, en la cadena Ser.

La compensación económica que reciben en concepto de desplazamiento, alojamiento y manutención por tener que trasladarse desde Valladolid a Salamanca fue de 40 céntimos. «Me parece... no sé, no encuentro el calificativo adecuado, pero creo que roza lo insultante», espetó Teodoro quien acusó a la Sacyl de que sean los enfermos los que tengan que pagar las carencias del servicio sanitario. «Los que nos tenemos que desplazar somos nosotros porque ellos carecen de recursos. Lo lógico es que trasladen al paciente. Pues no. Además de estar de estar recortándote todos los meses con deducciones en cuanto a Seguridad Social y demás, lo que hacen es cargarte además con los costes de desplazamiento», explicó indignado el marido de la afectada.

El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, justificaba ayer en el sistema de baremos fijado, «una regulación bastante objetiva», los 40 céntimos de ayuda, y puso como ejemplo las liquidaciones que se producen «cuando uno hace la declaración del IRPF», donde «a veces le devuelven 40 céntimos o 400». Y aclaró, en declaraciones recogidas por Ical, que, en este caso, no se trataba de una prestación exactamente sanitaria, sino que básicamente pretende facilitar el desplazamiento a las personas con bajos niveles de renta, «y en este caso el resultado de la liquidación es ese».

La respuesta de los sindicatos ante este caso fue contundente. La secretaria general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Carmen Amez, consideraba «de tal vergüenza» lo ocurrido que lo achacaba a las políticas sociales «que se han instaurado en Castilla y León». «Se te abren las carnes con estas situaciones. La ciudadanía tiene que decir basta ya. Esto no puede ser», aseveró la representante sindical, quien defendió que al ciudadano no le tiene que costar «absolutamente nada» la salud.

De «ofensivo y denigrante» tachó el pago de los 40 céntimos el presidente del CESM-Sindicato Médico de Castilla y León, José Luis Díaz Villarig. «No tiene ningún sentido. Será legal pero no moral», manifestó, al tiempo que subrayó que, «o se le da una cantidad justa, o mejor que no le den nada».

También desde Comisiones Obreras, el secretario general de la Federación de Sanidad, Pablo Vicente, calificó de «vergonzante» la ayuda recibida por la paciente vallisoletana en concepto de desplazamiento, alojamiento y manutención, por tener que ser tratada en Salamanca. «¿Qué va a hacer el consejero para corregir esta disfunción?», se preguntó el representante sindical, quien acusó a Sáez de ser el responsable por tener transferida la Sanidad el Gobierno autonómico.

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