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La Junta aprueba una partida de 1,6M€ para el 29 de Octubre

La previsión es que el derribo de las primeras viviendas de esta barriada empiece este año

Barrio del 29 de octubre en Valladolid-J.M.Lostau

Barrio del 29 de octubre en Valladolid-J.M.Lostau

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El Mundo
Valladolid

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El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó una primera partida de 1,6 millones de euros para la primera fase de rehabilitación del polígono del 29 de Octubre, en el barrio de Pajarillos.

Construida en los años sesenta, esta barriada está formada por 570 viviendas muy deterioradas que el Ayuntamiento tiene previsto derribar para construir en su lugar otras 712 nuevas y 142 apartamentos tutelados. Dada la envergadura del proyecto y su alto coste -unos 90 millones según las previsiones iniciales- se optó por dividirlo en tres fases y la partida aprobada por la Junta será para los trabajos de la primera de ellas.

En esta fase inicial está previsto el derribo de las 174 primeras viviendas para construir otras 87 nuevas -las de los que han mostrado su interés por cambiar su piso antiguo por uno nuevo - y tiene un coste estimado de 19 millones, de los que 7,5 millones los aportarán la Junta, el Ayuntamiento y el Ministerio de Fomento. Un compromiso que se selló en el acuerdo tripartito firmado en el Ayuntamiento el pasado mes de diciembre según el cual la Junta pondrá 1,8 millones, el Ayuntamiento 2,2 y el Ministerio de Fomento 3,2 millones.

A la aportación de las tres administraciones habría que sumar los dos millones que, según las previsiones, pagarán los vecinos que cambien su vivienda vieja por la nueva y que deberán aportar alrededor de 20.000 euros al contar el nuevo piso con garaje y trastero. A estas cantidades hay que sumar los 3,8 millones de los promotores que ejecuten el proyecto, con lo que todavía faltaría una parte para completar.

La previsión del Ayuntamiento es que el derribo de las 174 viviendas incluidas en la primera fase, en el entorno de las calles Faisán y Cigüeña se acometa en 2015 para tener las 87 nuevas en 2017.

Hasta el momento, los responsables del Servicio Municipal de Vivienda y Suelo, VIVA, han mantenido reuniones con 130 de los 174 vecinos que ocupan las viviendas que serán derribadas.

Del total, y tras las conversaciones preliminares y la información recabada, además de los 87 que tienen intención de acogerse al cambio de vivienda por vivienda, otro grupo cogerá el dinero en el que está tasado el piso, entre 22.000 y 24.000 euros, para vivir fuera del nuevo polígono reconstruido. Y según las previsiones, otro 10% se inclina por la tercera opción: tomar el dinero y quedarse en uno de los 142 apartamentos protegidos de alquiler que se construirán en la zona.

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