medio ambiente
Denuncian por verter residuos de construcción junto a La Cistérniga
El gerente de Reciclados Pucelanos lo niega y acusa al presidente de la Asociación de Gestores de Residuos denunciante de tener intereses en juego
Lugar del paraje Valdezoño en el que estarían vertidos los residuos, según Agerdcyl-Agerdcyl
La Asociación de Gestores de Residuos de demolición y construcción de Castilla y León (Agerdcyl) y la empresa Reciclados Pucelanos se enzarzaron ayer en una polémica después de que la primera denunciara a la segunda ante la sección medioambiental de la Guardia Civil, Seprona, y la delegación territorial de Medio Ambiente por verter residuos de construcción y demolición junto a la sede de la empresa en el paraje de Valdezoño, cerca de La Cistérniga pero en el término municipal vallisoletano.
Agerdcyl acusa a la empresa de mezclar arenas de fundición que se usan para producir ladrillos con residuos de construcción y demolición para enterrarlo en la parcela 30 del polígono 9, algo que necesita una autorización. Según la denuncia, la cantidad rondaría las 30.000 toneladas, aunque reconocen no saberlo.
Alegan una «actividad de eliminación de residuos incontrolada con graves efectos para el medio ambiente» además de un «indudable beneficio económico» al ahorrarse los gastos de un correcto tratamiento.
La reacción de la empresa, que comparte localización y dueño con Cerámicas Zaratán, no se hizo esperar. Su gerente, Enrique Vázquez, se mostró «alucinado» en declaraciones a este periódico al enterarse de la denuncia. Niega los hechos y defiende que está autorizado para todos los trabajos que hace con 15 personas como planta de tratamiento de residuos y que ha sido visitado en varias ocasiones por agentes del Seprona, sin que haya tenido ningún problema.
El motivo de la acusación, reflexiona Vázquez, son los intereses en juego del presidente de Agerdcyl, Javier Llorente, a su vez presidente de Reciclados Sostenibles (RECSO) de tener intereses en juego y querer «arrastrarnos a la ruina con ellos» una vez que la empresa de Llorente atraviesa una situación económica delicada recien salida de suspensión de pagos, según Agerdcyl. Vázquez apunta a la planta que Llorente tiene en San Martín de Valvení donde «sí ha ido el Seprona por encontrar regularidades».
La asociación agrupa a 12 empresas de la Comunidad, entre ellas Reciclajes Pucelanos. «Me deberían representar», se queja Vázquez, que se plantea denunciarla por manchar su nombre.