Pequeño se hace mayor

François Truffaut inmortalizó con una cámara cómo su personaje Antoine Doinel crecía en la gran pantalla al tiempo que lo hacía el actor que le encarnaba, Jean-Pierre Léaud. Los 400 golpes fueron los primeros pasos del intérprete. También entre golpes ha dado sus primeros pasos, en esta ocasión sobre el ring, Laura Pequeño, púgil destinada a escribir el guión del boxeo femenino vallisoletano.

La joven boxeadora del Club Boxeo Diablo se ha reivindicado sobre el cuadrilátero en la localidad salmantina de Béjar, que acogió el Campeonato de España de Jóvenes. Allí, la vallisoletana sumó a su armario una prenda única que no venden en ninguna tienda de moda: el cinturón de campeona de España Joven; un compañero para el que consiguió el año anterior en el mismo escenario. Eso a pesar de que las sensaciones no fueron buenas tras el primer combate: «Bajé del ring y me puse a llorar, porque sabía que lo que había hecho no era lo que yo sé hacer. Se me bloqueó la mente, pero en el segundo combate escuché a la esquina (en la que se encontraba el campeón mundial Bernardo Marbán, su entrenador), hice lo que me pedía y así salió la final», confiesa Laura Pequeño, que venció a la canaria Katherina Bellatrix.

Aunque en el boxeo uno siente la soledad del ring, lo cierto es que el púgil nunca está solo y la dirección de Marbán bailó con el talento de Pequeño para volver a cincelar un cinturón de campeona de España; una reválida que se colocaba entre interrogantes después de varios meses sin pisar un cuadrilátero (la última vez fue en una velada en la Cúpula del Milenio en el mes de abril): «Tenía la selectividad en la cabeza y prefería centrarme en los estudios. Seguí entrenando, pero la competición la dejé apartada pero no los entrenamientos, con el Campeonato de España como objetivo», confiesa esta estudiante de magisterio, consciente de que siempre hay que mantener la guardia alta con los libros.

Con 18 años la estrella de Laura Pequeño se despide de la constelación de promesas para surcar el universo de los mayores. A sus 18 años da carpetazo a su ciclo joven y abre el de élite. Un reto con letras mayúsculas que la púgil afronta con la confianza de una veterana: «No me da miedo nadie. Tengo confianza en mí misma. Sé que si lo doy todo puedo ganar. Me visualizo con otro cinturón de campeona de España», confiesa la pupila de Marbán, consciente de la importancia del factor psicológico: «La constancia y la positividad que tengo me parecen fundamentales. El 80% de un éxito está en la cabeza. Si tienes una mentalidad positiva lo vas a tener todo mucho más fácil», asegura.

Aunque Laura Pequeño está empezando a tejer el tapiz de su carrera deportiva (sólo lleva dos años en competición en los que ha ganado nueve de los once combates que ha disputado) su ilusión puede ser la gasolina que la lleve a metas más altas. La boxeadora ve que con trabajo, mucho trabajo, podrían abrirse las puertas de la selección española - «Me encantaría. Creo que daré la talla», asegura- o ¿Por qué no? La de la llama olímpica: «Pienso en los Juegos Olímpicos de Paris 2024. Esa es la meta a la que quiero llegar», admite la prometedora deportista.

El camino hasta Paris es largo y primero tiene que quemar etapas, como el que va a Santiago de Compostela. Un sendero en el que el primer desnivel está en el peso de competición. Laura Pequeño ha sido campeona de España Joven en 51 kilos y en 57. Ahora quiere encontrar en la báscula su número de la suerte: el 54. «Cuando estaba en 54 kilos estaba perfecta de velocidad y de potencia. Es el peso en el que me he encontrado más cómoda; en 57 no era tan explosiva», admite.

Laura Pequeño ahora se peleará con rivales de la talla de Marina Carrasco y Alba Ortiz, a las que no teme encontrarse en el ring. La sesión infantil ha terminado y la película proyecta ahora una historia para mayores de 18; una categoría élite para la que la vallisoletana ya cuenta los días para debutar. Un estreno que podría llegar en los campeonatos de España de clubes que acoge la localidad berciana de Ponferrada el próximo mes de diciembre.