VALLADOLID
La app vallisoletana que conecta a las personas mayores
Un prototipo creado por graduados de la UVa y premiado por el programa Prometeo busca conectar a las personas mayores con proveedores de servicios y apoyo para mejorar su vida

Los egresados de la UVa Mónica Sanz, Sara González y Mario Cobreros que han participado en el proyecto ‘Helpinder’
La soledad y la falta de acceso a las nuevas tecnologías son dos de los aspectos que más afectan a las personas mayores en su día a día y la satisfacción de sus necesidades. Un equipo de egresados de la Universidad de Valladolid (UVa) decidió atajar estas problemáticas mediante la creación de una aplicación móvil destinada a conectar a las personas mayores con proveedores de servicios y apoyo.
‘Helpinder’ nace dentro de los Proyectos de Innovación Docente que impulsa la UVa con el objetivo de frenar los cambios sociales y tecnológicos que provocan la exclusión digital de las personas mayores, y tratar de mejorar su calidad de vida especialmente en el medio rural. Para ello esta app busca facilitar mediante la creación de relaciones interpersonales el acceso a productos, servicios y apoyo humano.
«Funciona como una red solidaria y de apoyo vecinal que conecta directamente a personas que necesitan ayuda para cuestiones como el transporte, compañía o pequeñas gestiones, con otras que pueden ofrecer su tiempo, habilidades o servicios, de forma voluntaria o remunerada», explica Sara González Álvarez, profesora ayudante doctora en la ETS de Arquitectura de la UVa y coordinadora del proyecto.
Así, esta herramienta digital pretende «promover la autonomía, la colaboración y la vida independiente de las personas mayores en sus propios entornos de vida». Además, de contribuir a «superar algunas problemáticas ante las que el colectivo de personas mayores es especialmente vulnerable, como la soledad no deseada»
La aplicación funciona mediante un sistema de emparejamiento (matching) y geolocalización, similar al de las aplicaciones de citas, pero orientada a un enfoque social y «dirigido a la creación de relaciones de apoyo mutuo». Para su uso cada usuario se crea un perfil donde puede establecer si ofrece o solicita ayuda y el aspecto al que se refiere esta ayuda. En función a estos parámetros de necesidades, la ubicación y la disponibilidad la herramienta muestra coincidencias de otras personas que se ofrecen o buscan ayuda permitiendo «establecer un contacto directo mediante un chat seguro y la posibilidad de valorar la experiencia posteriormente».
«Su diseño es intuitivo, accesible y adaptado a personas mayores, con tipografía grande, iconografía sencilla, lenguaje claro y navegación lineal. Además, estamos trabajando en incorporar mejoras de accesibilidad, como comandos de voz o ajustes de contraste y tamaño de texto», remarca.
La iniciativa surgió de la unión de dos líneas de trabajo establecidas por la UVa, por un lado, el Proyecto de Innovación Docente ‘Aprendizaje-Servicio con Personas Mayores’ «que acerca al alumnado de Trabajo Social a la comunidad de mayores de los Centros de Vida Activa de Valladolid» para conocer sus necesidades y deseos»; y, por otro, el Proyecto ARADOS, centrado en innovación y diagnóstico participativo en el medio rural.
La unión de ambas experiencias llevó a los cuatro egresados que componen el equipo de trabajo, formado por González Álvarez dos doctores en Trabajo Social y un graduado en Ingeniería Informática; a llegar a la conclusión de que «muchas personas mayores, sobre todo en pueblos pequeños, tienen dificultades para acceder a servicios básicos». Estas personas se ven afectadas por el hecho de que la población está cada vez más envejecida en estas ubicaciones, algo por lo que sus redes sociales de apoyo, que incluyen a sus familiares, vecinos y amigos, «son cada vez más limitadas».
«El envejecimiento y la despoblación rural son dos de los grandes retos de Castilla y León y el conjunto de España. En los pueblos existe una fuerte cultura de apoyo mutuo, sin embargo, cada vez hay menos gente con capacidad para prestar apoyos. Por ello queremos aprovechar la tecnología para reforzar esos lazos comunitarios y reducir la brecha digital, ofreciendo una aplicación que resulte fácil, cercana y útil para quien más lo necesita», incide.
Además de contribuir a su autonomía y la formación de comunidades de apoyo, de forma complementaria, buscan «fomentar la solidaridad intergeneracional, dinamizar la economía local y reducir la brecha digital entre el entorno urbano y rural. Todo ello orientado a que las personas mayores puedan vivir en su hogar en las mejores condiciones el mayor tiempo posible».
El proyecto, que se ha materializado en forma de prototipo, ha sido uno de los reconocidos por el Programa Prometeo, algo que supone un gran impulso para la iniciativa. «Nos ha permitido disponer de recursos para seguir desarrollando la herramienta, visibilizar nuestra idea y consolidar el trabajo interdisciplinar entre arquitectura, trabajo social e ingeniería».
De cara al futuro, quieren seguir trabajando en ‘Helpinder’ que podría convertirse en una herramienta «clave» para fijar población y mejorar la calidad de vida en los pueblos, al «facilitar el acceso a servicios, promover la economía circular y fortalecer el tejido vecinal». También indica que puede suponer un impulso a la digitalización del medio rural, «ofreciendo una visión positiva y moderna del territorio como espacio de innovación y solidaridad».
«Nos gustaría que sirviera para revalorizar la vida en los pueblos y demostrar que la tecnología también puede tener un rostro humano. Queremos que las personas mayores se sientan acompañadas, útiles y conectadas, y que los más jóvenes vean en esta herramienta una forma de participar activamente en su comunidad».