CARLOTA AMIGO
«El pacto se dio porque el PP entró por el aro a nuestras medidas»
Portavoz de Cs en las Cortes de Castilla y León. Ni se siente dirigida ni cree que la suya vaya a ser una portavocía light. Es más, ya avisa a Igea y a Mañueco que va a preguntarles y no «a dorarles la píldora».
Le gusta marcar diferencias y lo hace hasta con el nombre, cuando asegura que prefiere que la llamen Carlota y no Ana Carlota «porque anas ya hay muchas». Y con la misma determinación Carlota Amigo (León, 1969) defiende como gran experiencia su paso por la política municipal, algo que asegura deberían hacer todos antes de dar el paso a la autonómica o nacional.
PREGUNTA.- ¿Cuál es su reto como portavoz de Cs en las Cortes, que como grupo de gobierno no parece que vaya a ejercer tanto control? Ahí está el ejemplo del primer pleno.
RESPUESTA.- Bueno, control vamos a ejercer. Yo he venido aquí para trabajar como portavoz del grupo y queremos llevar a cabo muchas medidas que son interesantes para los ciudadanos de Castilla y León. Para mí es un reto y responsabilidad enorme, que afronto con mucha ilusión y ganas. Desde luego, hemos venido a dar la batalla estemos en el Gobierno o en la oposición. Lo que quiero conseguir es que todas las medidas que queremos poner en marcha en esta legislatura podamos llevarlas a cabo.
P.- ¿Pero a quién le van a dar la batalla, a su gobierno o a la oposición?
R.- Es que gobernamos. La batalla es respecto a las políticas que hay en Castilla y León, que hay muchos problemas, por ejemplo en la Consejería de Sanidad que tenemos que reorganizarla y nosotros vamos a dar la batalla, estamos en el Gobierno y estamos dando la batalla para que mejoren las políticas públicas.
P.- Bien, pues vayamos a lo concreto de esa batalla. ¿Le va a preguntar al presidente o al vicepresidente de la Junta por qué no se cumple ese acuerdo de las 35 horas firmado?
R.- Primero, ese acuerdo que se firmó con los sindicatos se hizo en una situación previa a las elecciones. Ahora mismo estamos en otra situación en la que Cs gobierna con el PP. Seguimos con presupuestos prorrogados, con un bloqueo del PSOE a nivel nacional que perjudica enormemente a lo que son las arcas municipales, autonómicas y estatales. Sí queremos aplicarlas, pero lo que el Gobierno le ha dicho a los sindicatos es ‘vamos a estudiar cómo y cuándo se pueden ir aplicando’. Y me explico, si el poner 35 horas en Sanidad supone que no voy a poder atender a pacientes pues, mire, primero atiendo a los pacientes. Ojalá no hubiera Brexit, ojalá tuviéramos unos presupuestos a nivel nacional, ojalá no hubiera la retención de los 440 millones.
P.- Vamos, que dan igual los acuerdos que se firmen. Este es un acuerdo firmado por un ejecutivo del PP…
R.- En el que no estaba Cs.
P.- Sí, pero lo apoyaba y ustedes en campaña se comprometieron a esas 35 horas. Y me va a perdonar pero lo del no gobierno, no presupuestos y el Brexit suena a excusa porque cuando se firma todo eso ya estaba. ¿El cambio ahora es que ustedes gobiernan y antes no?
R.- No, ha cambiado mucho la situación. Es que cuando Cs apoya el que se apliquen las 35 horas estábamos dando por supuesto que íbamos a tener un gobernante serio que iba a poder presidir el país. Pero es que lo que tenemos es un bloqueador del país, de los servicios públicos y una persona que está perjudicando gravemente a los ciudadanos, incluso a los que le votan. Cuando se firmó el tema de las 35 horas o cuando Cs lo apoyó lo que menos pensamos es que nos íbamos a ir, además, a otras elecciones. Eso ha cambiado todo. Vamos a intentar que no haya recortes en la legislatura, vamos a ser serios en los planteamientos económicos. Creo que las cosas mejor despacio y bien que no deprisa y mal.
P.- ¿Y cómo encaja en ese discurso el aumento de altos cargos y en más de 800.000 euros el gasto en sueldos políticos, sobre todo cuando Cs se comprometió a reducirlos?
R.- Los cargos que Cs ha seleccionado, primero son cargos importantes para llevar a cabo las medidas que nosotros queremos, son gente que viene del ámbito profesional en cada área y están preparados…
P.- Yo no le he preguntado por eso, entre otras cosas porque aún está por ver si están preparados o no para ese cargo.
R.- Ya, pero no es lo mismo incorporar a personas que son del partido y que no tienen nada que ver con las direcciones que ocupan, con gente profesional de un sector que sabes que te va a ayudar a implantar las políticas públicas que tú quieres llevar a Castilla y León. Es verdad que hasta ahora mismo había un número de altos cargos en la Junta y que al entrar Cs en el Gobierno ha podido aumentar. Pero eso no tiene que nada que ver con las 35 horas.
P.- ¿Ve justificado el aumento de cargos y gasto que se ha hecho?
R.- Los altos cargos que Cs ha seleccionado están justificados porque por mérito, por experiencia y para llevar a cabo las políticas públicas que queremos. Y si eso al final va a revertir en beneficio de la Comunidad y de la gente en Castilla y León bien contratados están.
P.- O sea, justifica el sobrecoste.
R.- Sí, en el caso de Ciudadanos.
P.- Oiga son un solo Gobierno, de coalición, pero uno solo, ¿no?
R.- No, somos dos partidos diferentes que ahora mismo gobernamos la Comunidad.
P.- Pero las decisiones se toman en común y las asumirán los dos.
R.- Nosotros tenemos un acuerdo de gobierno y hay decisiones que cada uno toma, que se comunican y se aceptan.
P.- Los cargos de Cs están justificados, ¿los del PP también?
R.- Yo es que en los cargos que selecciona otro partido no me voy a meter. Yo vengo de la administración local y el número de cargos que hay en un ayuntamiento, en proporción, al que hay en una Comunidad Autónoma es mínimo y, además, comparando con otros comunidades tenemos menos.
P.- Insisto, si es sencillo de responder, ¿el aumento de gastos y altos cargos está justificado?
R.- En el caso de Cs, sí claramente y en el del PP entiendo que también. Pero no lo puedo garantizar porque no soy del PP y no soy yo quien para meterme en quién contratan o no.
P.- ¿No teme que su potavocía pueda quedarse en algo light, vacía y, sobre todo, dirigida por quien el verdadero jefe, Francisco Igea?
R.- No le niego que la situación no es fácil. Lo más cómodo para un portavoz es estar en la oposición. Es mucho más fácil, sólo te dedicas a criticar, haces pocas propuestas en positivo… Lo fácil para cualquier portavoz es ser portavoz de la oposición. Me parece muy importante ser portavoz y, aunque mi figura se diluya, no es menos cierto que para Cs lo importante era poder cambiar las políticas en Castilla y León. Si yo voy a ser tan relevante o no, es lo de menos.
P.- ¿Va a controlar al presidente y a su vicepresidente con preguntas serias de control y no facilonas?
R.- A algunos les podrán parecer facilonas pero, también, voy a hacer preguntas de control, cosas que considero que es importante que el presidente conteste.
P.- ¿Se estrenará en el próximo pleno o todavía no?
R.- Pues igual sí hago alguna ya en el próximo. Lo que sí hemos dejado abierto es que se hagan, porque hasta ahora como sabe ocurría que el partido que gobernaba no hacía preguntas al presidente. Eso sí, no tengo yo por qué preguntar como la oposición, pero cuando yo considere necesario le vamos a preguntar.
P.- ¿También a su vicepresidente?
R.- Por supuesto. Aunque estemos en el gobierno hay un parlamento que tiene que llevar adelante y cumplir con unas normas democráticas que nosotros no queremos perder. Vamos a preguntar y no la vamos a utilizar para dorar la píldora a nadie, ni a Francisco Igea ni a Alfonso Fernández Mañueco.
P.- Volviendo a los altos cargos. ¿Ustedes, en concreto Inés Arrimadas, que fueron muy duros con Ignacio Cosidó con el asunto del WhatsApp y la operación kitchen de las cloacas del estado exigiéndole responsabilidades políticas, cómo ven que ahora Mañueco lo rescate como un asesor más?
R.- Primero, es una cuestión en la que no me tengo que meter.
P.- Su partido lo asume en ese gobierno de coalición.
R.- Si fuera otro puesto el que va a ocupar, pero no me meto ni en los asesores que incorpora el PSOE a sus filas, que también tiene gente imputada y declarada culpable en el tema de las black y les ha puesto de directores de Renfe y cosas así, ni me tengo que meter en puestos que son de confianza de cada partido. Si para el PP el señor Cosidó es un puesto de confianza, yo no tengo que valorar eso.
P.- ¿Pero es que están en el mismo gobierno y Cosidó será un cargo de ese gobierno?
R.- No es un alto cargo, es un asesor de un consejero de Presidencia y, para nada, me voy a meter yo con los asesores que contrata otro partido.
P.- ¿No va en contra de la política de Cs que lo que defendía era evitar casos como el de Cosidó?
R.- Hasta ahora Cs está cumpliendo las medidas que queríamos aplicar de no estar más de ocho años en un cargo y todas esas cuestiones. El señor Cosidó no tiene nada que ver y para mí la contratación de Cosidó no es preocupante ni relevante porque va a un puesto que no es relevante.
P.- ¿Cómo valora el que la Junta esté copada por hombres?
R.- Nosotros no estamos de acuerdo ni con los cupos ni con las cuotas femeninas para llegar a determinados puestos. Creemos que las personas tienen que ser elegidas por mérito, experiencia y capacidad profesional. Lo que ocurre es que es verdad que las mujeres tenemos un techo, un problema con el tema de la maternidad. Hay un ascenso profesional hasta una edad de todas las mujeres y hay una brecha que ese ascenso se paraliza, justo cuando eres madre. Eso se tiene que solucionar con políticas de conciliación de la vida familiar o laboral. Yo estoy convencida que si se logra conciliar esa maternidad, esa vida familiar con la laboral, las mujeres vamos a llegar a esos puestos. Pero no quiero que haya cinco consejeras y cinco consejeros, a lo mejor prefiero, porque están más formadas, que haya ocho consejeras y dos consejeros.
P.- Este un discurso malévolo para las mujeres. Si el problema, según usted, es la maternidad y el que puedan conciliar van a estar en desventaja siempre. ¿En Castilla y León no hay mujeres preparadas para ser consejeras?
R.- Claro que sí que las hay.
P.- Pues en el gobierno del PP y Cs se las ve poco.
R.- En este gobierno hay tres consejeras que gestionan las consejerías más importantes, en cuanto a presupuesto, personal y los servicios que prestan.
P.- Sí, pero el resto, presidente, vicepresidente, consejeros, viceconsejeros, secretarios generales, directores generales… casi todos se nombran en masculino… ¿No creen que son un mal ejemplo y, una vez más, incumplen lo que dicen?
R.- No. Mire yo he comprobado que soy la segunda portavoz de grupo que ha habido en las Cortes.
P.- Porque pactaron sino sería Igea.
R.- Eso no lo sabe porque tendríamos que elegir el portavoz.
P.- Perdone, ya se había elegido.
R.- Bueno, era la lógica pero no sabemos lo que habría ocurrido. Vamos a dejar abierto eso. Lo curioso es que todos los que salen en la Cámara a decir que no cumplimos con la paridad son hombres. Luis Tudanca es hombre, Pablo Fernández es hombre, Luis Mariano Santos es hombre; es que el de Por Ávila es hombre, es que Raúl de la Hoz es hombre.
P.- ¿Cómo se defiende un pacto con el PP que lleva más de 30 años gobernando con ese discurso de Cs del cambio y con esa afirmación de Igea de que a Mañueco sólo le ha faltado ser consejero de la marina? Le faltaba ser presidente de la Junta y lo es gracias a ustedes, pese a perder las elecciones claramente.
R.- A ver. En estas elecciones quisimos entrar en los gobiernos porque considerábamos que teníamos la suficiente experiencia para aplicar nuestras políticas. ¿Qué hubiéramos podido aplicarlas con el PSOE? Yo no estoy en la ejecutiva nacional que fijó como socio preferente al PP. En Castilla y León se dio la circunstancia de que el PP entró por el aro a todas las medidas de generación que quería aplicar Cs. Nos dijo que sí y por eso creo que se ha conjugado y conjuga bien. Otra cosa es que el PP no hubiera querido entrar por el aro a las medidas de Cs o que no nos estuviera dejando aplicarlas.
P.- Vamos que han hecho pasar por el aro al PP.
R.- Si quiere verlo así…
P.- Lo acaba de decir usted.
R.- Sí, es que el PP tiene claro que si no hubieran aceptado nuestras medidas, a eso me refiero, no estarían ahora mismo gobernando.
P.- Tampoco sabe si el PSOE las hubiera aceptado porque no se sentaron con ellos.
R.- Eso es cierto, pero cuando desde tu ejecutiva te dicen que el socio preferente es uno y dice que sí, ya no buscas otro novio.
P.- ¿Se siente a gusto con este pacto? ¿No cree que han traicionado la decisión del electorado?
R.- Si le me lo dice hace unos meses, bueno... Pero hay una cuestión, como política y como votante que me parece lo más grave que ha ocurrido en democracia, el que aceptemos que Bildu entre en las instituciones. Y eso quien lo está permitiendo es el PSOE. Normalizar un partido que apoya el terrorismo, pasearse con Otegi no es lo ideal en democracia. Eso hace que en otras comunidades, como en ésta, en la que a lo mejor podías haber llegado a acuerdos, ahora pensemos que no nos hemos equivocado tanto y no nos sintamos mal porque hay buena sintonía con el gobierno actual.
P.- ¿En cambio sí ve bien que su partido esté en gobiernos que se apoyan en la extrema derecha de Vox?
R.- Que yo sepa con Vox no gobernamos.
P.- He dicho, gobiernos en los que ustedes están que se apoyan en Vox.
R.- Si lo que me pregunta es si me gustan las políticas de Vox, no me gustan. Para nada comparto el ideario de Vox ni las materias de las que hablan, ninguna, salvo la unidad de España. ¿Qué ocurre? Pues que en el caso del gobierno de Andalucía estamos llevando a cabo un cambio enorme y eso beneficia a los andaluces. Tengo que pensar, no si gracias a que se abstuvo Vox gobierno con ellos, sino que las políticas que estamos aplicando están siendo muy beneficiosas para los ciudadanos.
P.- ¿Y eso no es una incongruencia? No comparto nada con Vox, pero sí acepto sin más su apoyo, sin exigirle que renuncien a nada.
R.- Aunque aceptes el apoyo en el gobierno es que las políticas son las nuestras, no las de Vox.
P.- ¿Eso no es blanquear a una extrema derecha que, por ejemplo, niega la violencia machista y pide acabar con ley que la combate?
R.- Para nada. Y en la ley de violencia de género Ciudadanos es garante de esa ley y de que no va a desaparecer ni se va a cambiar. Somos unos convencidos de eso y de la Ley LGTBI+ y de algunas cuestiones sociales, mal que les pese a la izquierda y a muchos partidos.