Fomento paraliza ahora uno de los tramos más avanzados de la A-11

Cuando no es la aparición de una calzada romana, es la quiebra de una empresa o, como en este último caso, las discrepancias entre la adjudicataria y el Ministerio de Fomento, pero la construcción de la Autovía del Duero a su paso por Soria vuelve a sufrir un inconveniente. La maquinaria pesada ha desaparecido del tramo La Mallona-Venta Nueva, que es el segundo más avanzado de la infraestructura. Tanto el Gobierno como la empresa adjudicataria niegan que haya un parón en las obras de construcción y afirman que la intervención continúa, pero en la zona no hay ni rastro de los trabajadores ni de la maquinaria como puede verse en las fotografías tomadas ayer en el recorrido del tramo.

La Mallona-Venta nueva es uno de los más avanzados de la A-11 a su paso por Soria. Según la última información facilitada por Fomento la ejecución se sitúa en el 68% y solo el Santiuste-El Burgo, ejecutado al 71% está más cerca de su conclusión. Las obras de La Mallona-Venta Nueva comprende un total de 6 kilómetros y fue adjudicada por 24, 6 millones a la empresa Collosa. Estos dos tramos tienen prevista su puesta en servicio el próximo año según la información dada por el ministro José Luis Ábalos.

El subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, aseguró ayer que los problemas que afectan a este tramo se deben a un «conflicto de intereses legítimo» entre la adjudicataria y Fomento. «Collosa defiende sus derechos y Fomento los suyos, que son los de todos», explica Latorre.  El subdelegado apuntó que el «conflicto» se circunscribe a los precios del material, pero aseguró que desconoce la cuantía que reclama la empresa. Según pudo saber este medio la reclamación superaría el millón de euros. Latorre aseguró que a pesar de esta discrepancia la firma «sigue trabajando» y que está realizando el «acopio de material» y en «paralelo» mantiene abiertas las negociaciones con Fomento. «Esperamos que se llegue a un acuerdo pronto», comentó reiterando que las obras «no están paradas» y que «se está procediendo al acopio de material para el aglomerado». El subdelegado afirmó además que hace 10 días estuvo visitando la obra y mantuvo un encuentro con los responsables de la empresa.

«Hay una pequeña diferencia en cuanto al precio», repitió Latorre. Cuestionado por la ausencia de máquinas en el recorrido, el subdelegado señaló que no estaba al tanto de que se haya abandonado la obra y se refirió de nuevo a su visita a la obra hace 10 días. «No se puede hablar de paralización en absoluto, yo los he visto trabajando hace diez días», remarcó. Latorre concluyó insistiendo en que este tipo de «diferencias de interpretación» es frecuente en las grandes obras.

Por su parte, fuentes cercanas a la empresa adjudicataria se manifestaron en un sentido similar al subdelegado. En este sentido confirman que hay una «interlocución» abierta con el ministerio de Fomento aunque consideran que es una situación «normal» que forma parte de las «negociaciones habituales» en este tipo de obras. Fuentes cercanas a Collosa afirman también que no hay constancia de que las obras estuvieran paralizadas. «Es una circunstancia normal de este tipo de obras», inciten añadiendo que «la intervención sigue su curso según la planificación prevista con Fomento».

Problemas

Las obras de construcción de la A-11 a su paso por Soria está dividida en seis tramos. Más allá del La Mallona-Venta Nueva y del Santiuste-El Burgo, con una ejecución que ronda el 70%, en el resto han existido problemas de diversa índole que han provocado retrasos en el desarrollo de la intervención. El «conflicto» que ahora afecta a La Mallona-Venta Nueva es uno más en el largo relato de la ansiada Autovía del Duero.

En estos momentos, el tramo más retrasado del trayecto de la A-11 por Soria es el que une Langa con Aranda de Duero. El Gobierno se vio obligado a rescindir el contrato con Isolux, adjudicataria original, y ahora mismo se está a expensas de la redacción de un nuevo proyecto y su posterior adjudicación. Solo se ha ejecutado el 4,5 % de los 66,7 millones presupuestados.

Los problemas económicos también afectaron a la empresa responsable del tramo entre El Burgo y San Esteban. La judicialización del concurso de acreedores de Assignia provocó un parón en las obras de año y medio. Afortunadamente, a finales de agosto se conoció la autorización del Juzgado Mercantil número 9 de Madrid para que la obra fuera traspasada a ASCH que en breve retomará las obras. En este caso solo se ha ejecutado el 22,7% de 9,2 kilómetros de este tramo. Por último, en el trayecto entre Venta Nueva y Santiuste, especialmente sensible porque afecta el puerto de El Temeroso, ha estado paralizada parte de la obra durante meses por la aparición de una calzada romana. Tras varios desencuentros, Fomento y Patrimonio han llegado a un acuerdo para elaborar un modificado y salvar la calzada. El modificado está en fase de redacción. Este tramo solo está ejecutado al 34,5%.

El recorrido de la Autovía del Duero en la provincia de Soria se completa con el tramo entre San Esteban y Langa de Duero. Los últimos datos del Gobierno sitúan el nivel de ejecución en el 40%. Esta parte de la A-11 tiene un coste de 54,3 millones de euros y afecta a un trazado de 12, 8 kilómetros.

Multas a manifestantes de Soria ya

La movilización de la Plataforma Soria Ya el pasado 23 de agosto en Villaciervos, en la N-122, está teniendo consecuencias, pero no de las que esperaba el colectivo ciudadano en forma de avances en la autovía del Duero. La Guardia Civil ha incoado tres procedimientos administrativos a otros tantos manifestantes como responsables de obstaculizar la circulación del tráfico rodado, una circunstancia que se prolongó durante más de 40 minutos en el transcurso de la concentración.

Varias personas decidieron protagonizar una sentada sobre el paso de peatones, rechazando levantarse a pesar de la insistencia de la Guardia Civil. Al menos una de esas tres personas ya ha abonado la sanción, que se eleva a 120 euros, y que por pronto pago se ha quedado en 60 euros, aseguraron desde la Soria Ya.

Uno de sus portavoces, Goyo Sanz, manifestó que la Plataforma muestra su disconformidad con las multas, porque «se criminalice a ciudadanos por participar en una manifestación pidiendo cosas para Soria». En ese sentido, enfatizó, «la Plataforma siempre estará al lado de las personas que reivindiquen pacíficamente mejoras para nuestra provincia».

Sanz reconoció que el permiso solicitado para la movilización no contemplaba la sentada, y que fue una decisión de determinadas personas. Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, recalcó que las reivindicaciones de la Soria Ya «no se cuestionan, al revés», pero insistió en que el permiso pedido por el colectivo se concedió para una concentración en el término municipal de Villaciervos, en ningún caso para una sentada.