Diario de Valladolid

El referente moral de la nueva derecha

El político ‘popular’ abulense ha sido durante tres décadas y media el entrenador que ha sabido elegido a la mejor cantera para dar los mejores años al Partido Popular

Cargos públicos del PP abulense, junto con el ex presidente Aznar y el ex ministro Acebes, reciben el féretro de Blázquez.-ICAL

Cargos públicos del PP abulense, junto con el ex presidente Aznar y el ex ministro Acebes, reciben el féretro de Blázquez.-ICAL

Publicado por
Antonio García

Creado:

Actualizado:

Hay gente que no necesita de los apellidos para ser reconocido en cualquier conversación. Hablar de Feliciano en Ávila era hacerlo de quien ha sido el referente moral de la nueva derecha en España desde principios de los ochenta. Feliciano no precisaba de su primer apellido para que cualquiera supiera que al utilizar este nombre en su tierra, se estaba hablando de Feliciano Blázquez, el descubridor de José María Aznar y Ángel Acebes, entre otras muchas figuras del PP que ayer le dieron su último adiós en Ávila.

A Feliciano –Blázquez– no le hacía demasiada gracia que se le considerara el mentor político de Aznar y Acebes. En 2002, cuando este periódico le preguntó sobre si estaba cansado de esta consideración respondió: «No se puede decir que esté cansado. Depende del tono en el que te lo digan». Este hombre de aspecto aparentemente frágil, pero con una gran personalidad y un instinto político de los que ya no quedan, consideraba «algo exagerado» que fuera considerado un referente moral en el partido que contribuyó a fundar, pero lo cierto es que así era.

Quienes le conocieron bien le definen como un político de pocos discursos y mucho pisar el barro; un político que no necesitaba ejercer su autoridad, porque todos se la reconocían sin necesidad de que la demostrara. Estas características, junto al amor por una tierra que nunca quiso abandonar, resumen parte de la personalidad de un licenciado en Medicina, que finalmente centró su vida en la política tras conocer en 1982 a José María Aznar, cuando quien después fue presidente del Gobierno iniciaba su carrera política en Ávila.

Fue Feliciano Blázquez quien le animó a recorrerse la provincial conociendo pueblo a pueblo a cada vecino para conseguir un escaño en el Congreso en la tierra donde hasta ese momento arrasaba la UCD y después el CDS del abulense Adolfo Suárez. Pero no sólo le animó, también le acompañó en una trayectoria inicial muy complicada durante la cual Aznar forjó parte de su personalidad. Así era Feliciano. Un hombre que se manejaba bien fuera de todo boato, en el contacto con la gente.

Por ello, el actual vicesecretario de Comunicación del PP y diputado por Ávila, Pablo Casado, suele recordar el consejo que le dio Aznar tras recibirlo de Feliciano: «Echa raíces, empadrónate de verdad, trabaja como el que más, porque tus compañeros ya han hecho la mili, y no te metas en temas orgánicos del partido».

Mientras Feliciano contribuyó a la ascensión política de Aznar, sus aspiraciones se quedaron en Ávila, por cuya circunscripción fue senador y posteriormente diputado durante cinco legislaturas. En la última, con Acebes de número uno, le dejó su escaño en el Congreso a Sebastián González, otro de los ‘jugadores’ que sacó del ‘banquillo’ para que desempeñara una labor destacada en la política provincial y nacional. El se convirtió en presidente de Caja de Ávila.

Feliciano Blázquez nació en Junciana (Ávila) en 1935 y murió en Ávila el 30 de noviembre.

AZNAR: «PIERDO A UN GRAN AMIGO Y UN MAGNÍFICO ESPAÑOL»

El funeral para despedir a Feliciano Blázquez contó con la presencia de buena parte de la ‘familia’ del Partido Popular, con José María Aznar y Ángel Acebes como figuras destacadas, a las que el fallecido impulsó desde Ávila.

A las puertas de la capilla del crematorio, Aznar se refirió a su mentor político como una «gran persona» y «un excelente amigo de muchos años». Además, reconoció que Blázquez fue un «magnífico consejero y un magnífico español».

«No se pueden reunir más cualidades dentro de una misma persona», comentó el expresidente del Gobierno, quien concluyó su loa a su ‘maestro’ político diciendo: «Siento mucho su fallecimiento. Pierdo a un gran amigo».

Aznar dio el pésame a la viuda de Blázquez, así como a sus siete hijos, que también estuvieron acompañados por el exministro abulense Ángel Acebes; el eurodiputado Agustín Díaz de Mera; el senador Miguel Ángel García Nieto, y la consejera de Familia, Alicia García. También estuvieron el alcalde, José Luis Rivas y el presidente de la Diputación, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, entre otros.

tracking