Matesanz rechaza la «barra libre» del «todo vale si tiene éxito»

El periodista segoviano Alfredo Matesanz rechazó ayer la «barra libre» del «todo vale si tiene éxito» y reclamó un «filtro», dentro de un mundo global, a través de los principios del periodismo, con independencia del soporte o medio a través del que se difunda la información. Así, advirtió del triunfo de la «posverdad», de las «falsas noticias», de las «mentiras» y de los «hechos alternativos».

Matesanz, que recibió el Premio Francisco de Cossío a la trayectoria profesional en su XXXII edición, advirtió de que la precariedad laboral, por los bajos salarios o el miedo a perder el empleo, impide al periodista ejercer la profesión con libertad. Además, recordó que la demolición de los pilares del periodismo afectará a la libertad de información, uno de los elementos del sistema democrático, dentro del equilibrio de los poderes.

El veterano periodista radiofónico aseguró que la tarea de interpretar la realidad es «más necesaria que nunca» y, por lo tanto, añadió que el trabajo de los periodistas no es «superfluo, sino todo lo contrario». Por ello, Alfredo Matesanz aprovechó su intervención para poner en valor el trabajo periodístico, frente a la información rápida, inmediata y que se elabora sin el criterio de la calidad. Asimismo, explicó que ante el cambio «profundo» que afrontan los medios ya que aseguró han perdido el valor que suponía jerarquizar las noticias y fijar la agenda. Señaló que la gente no está más informada por tener en sus casas teléfonos inteligentes o tabletas, ya que en su opinión dan acceso a un «bosque inmenso de información sin calidad».

También, señaló que los periódicos necesitan ser solventes para aplicar criterios periodísticos y ser independientes, algo complicado –dijo– por la caída del 33% de la «audiencia» desde 2008 o del 40% de los ingresos desde 2001. Sin embargo señaló que la radio, que se daba por muerta en los 80, mantiene la confianza de los oyentes, mientras la televisión ha ganado más peso en la información.

Además, Alfredo Matesanz, Hijo Predilecto de Segovia, reivindicó el periodismo local, vinculado a lo inmediato, a la realidad, puesto que aseguró que permite observar la vida en general. También destacó que contribuye a formar la opinión pública. Así recibió con profunda emoción y gratitud el premio a su trayectoria, que acaba de terminar al jubilarse en la que era su «casa», informa Ical.

Este segoviano elaboró y presentó durante más de 40 años los programas más diversos, pasando por todos los géneros radiofónicos. Dedicó la mayor parte de su trayectoria profesional a las ondas, desempeñando en Radio Segovia –emisora asociada a la Cadena SER– la subdirección y jefatura de los Servicios Informativos.

Su figura está también está vinculada estrechamente a su papel como presidente de la Asociación de la Prensa de Segovia durante 14 años; y organizador y presidente, por este motivo, del prestigioso Premio de Periodismo Cirilo Rodríguez que distingue cada año a corresponsales y enviados especiales en el extranjero. Además, Matesanz colaboró en la presentación de numerosos acontecimientos vividos en la capital segoviana y fue nombrado Hijo Predilecto de Segovia.

El jurado de los Cossío emitió el fallo el pasado 3 de noviembre. Al palmarés se suman dos menciones especiales en las modalidades de televisión y fotografía: a los periodistas Lucía Rodil, Paco Gómez, José María Valdivieso y Sandra Vasallo, por sus noticias sobre el acceso a la universidad; y al fotógrafo Fernando Blanco, por una imagen captada durante la celebración el pasado verano de una boda en Valladolid en la que irrumpió un joven de nacionalidad marroquí con consignas islámicas.