La oposición considera las cuentas de Sanidad insuficientes para revertir los recortes

Los grupos de la oposición en las Cortes de Castilla y León lamentaron en la Comisión de Economía y Hacienda en la que el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, presentó las cuentas de su departamento para 2017, que de nuevo el presupuesto sanitario es insuficiente para poder revertir los recortes acumulados en los últimos años y avanzar hacia la mejora del sistema.

Así, la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Mercedes Martín, dijo que las cuentas sean la venta de un “libro tardío, falso y cargado de buenas intenciones”, con los mismos objetivos y las mismos proyectos de siempre, porque no se han ejecutado. A su juicio, de nuevo se asiste a unas cuentas que no reparan en la universalización del sistema, que no revierten el “medicamentazo” a 600.000 pensionistas y que siguen perpetuando el problema de las listas de espera. “Por favor, déjenos de cuentos griegos”, le espetó, en alusión al plan de reducción de listas de espera -'Perycles'-, y vele por la sanidad pública que “está en peligro”.

Martín pidió a Sáez que dé “credibilidad a la letanía” de mareas blancas que están pidiendo a gritos un cambio en el modelo, que está castigando, además, a la Atención Primaria, la puerta de entrada al sistema, cuyo presupuesto para este 2017 es inferior, de entrada, al de 2010: 1.152 millones, frente a los 1.356 de hace siete años, denunció.

Finalmente, Martín fue muy crítica, como ya lo hiciera ayer en Ávila, con el reparto de los 18,2 millones donados por la Fundación Amancio Ortega para dotar a la red sanitaria de equipos de tratamiento y diagnóstico de última generación contra el cáncer. Consideró una “crueldad” haber dejado fuera del mapa de aceleradores lineales a las provincias de Ávila, Palencia, Segovia y Soria, y al área del Bierzo, cuatro de las ocho ciudades de España que no cuentan con esta tecnología, denunció. “Explíquenos esta decisión tan cruel”, incidió.

La procuradora de Podemos Isabel Muñoz tampoco dejó pasar por alto este acuerdo, y pidió al empresario que “deje de lavar su imagen” y pague los impuestos en España. En este sentido también se pronunció el portavoz del Grupo Mixto, José Sarrión, quien le parece sorprendente que se retroceda décadas en el tiempo, cuando las empresas donaban medicamentos al tercer mundo para limpiar su imagen. “Este es el presente de lo que hasta hace poco era considerado uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo”, dijo, “depender de mecenas”

Sáez Aguado lamentó que se critique la aportación de 18,2 millones de euros para poder atender a los oncológicos con equipos de última generación, y un ejercicio de responsabilidad social corporativa “tan importante”, con la que se va a poder consolidar el mapa de atención oncológica en la Comunidad.

Respecto al presupuesto para este 2017, Muñoz lamentó que sean unas cuentas austeras que sirven para consolidar la lista de espera, el “empobrecimiento” de la sanidad rural, la falta de personal y “un modelo de gestión nefasta”. También, lamentó que la Atención Primaria sea la cenicienta del sistema, y vea caer, en tiempos de recuperación, su presupuesto por debajo del de 2010.

Mientras, Sarrión, que empezó su intervención con un mensaje de apoyo a los trabajadores del transporte sanitario que hoy volvieron a protagonizar una jornada de huelga “porque se está incumpliendo su convenio colectivo”, tachó las cuentas de “insuficientes para poder revertir el recorte acumulado” desde hace años en la Comunidad. Un recorte que, bajo su punto de vista, no va a permitir acometer las mas de 600 jubilaciones de profesionales hasta 2020; “graves problemas” que aquejan a todas las provincias y que están derivando en las “grandes mareas blancas”. “En la inmensa cantidad de conflictividad que aqueja a la sanidad pública en Castilla y León, muy especialmente en el medio rural”.

Finalmente, el portavoz de Ciudadanos den la Comisión, Manuel Mitadiel, dijo que, en principio, son unas cuentas con luces (crecen un 14 por ciento las inversiones; un cinco por ciento los gastos corrientes y un 2,47 el capítulo de personal), aunque también tienen sus sombras. Entre estas denunció obras “veteranas” como los centros de salud de Villalpando, Parada del Molino, así como la falta de control del presupuesto por parte de la Consejería, ya que en 2016 de loa partida prevista se dejó de invertir un 67 por ciento.

Mitadiel también denunció que la Ley de medidas contemple una disposición por la que, de aprobarse, Sacyl podría vincular la red asistencial sanitaria a los centros o servicios sanitarios radicados en el territorio de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, que estén autorizados, algo que para él es “la puerta de entrada hacia la privatización”. En todo caso, dijo que a través de enmiendas velarán para que esto no sea así, y dijo que es un presupuesto que aporta, que han apoyado, y que es insuficiente, en tanto “que toda demanda es insuficiente”, concluyó.