Homenaje al Empecinado y a su lucha por la libertad
Más de 300 personas recuerdan en Castrillo de Duero el 244 aniversario del nacimiento del héroe militar que defendió los ideales constitucionales
Desfile por las calles en honor al héroe militar de Castrillo.-NURIA MONGIL/PHOTOGENIC
El primer castellano que se alzó en armas contra la invasión francesa. El militar que ascendió por méritos de guerra. Un fiel defensor de la Constitución de 1812 y un ‘empecinado’ en plantar cara al Rey Fernando VII, marcando así su sentencia de muerte. Tras una vida de lucha, El Empecinado se instaló como labriego en el pueblo que lo vio nacer el 2 de septiembre de 1775. Se mantuvo firme a sus ideales y ante la negativa de recibir un millón de reales y un título nobiliario (Condado de Burgos), fue ahorcado en la Plaza Mayor de Roa, el 19 de agosto de 1825.
Ayer, el eco de su lucha en defensa de la libertad fue motivo del homenaje a cargo de el Círculo Cultural ‘El Empecinado’, 244 años después de su nacimiento a las 13.00 horas en la plaza de la Constitución de la localidad.
Engalanados con atuendos militares, los asistentes se encaminaron hasta la fachada del edificio donde nació El Empecinado: «Llevamos 20 años rindiendo este homenaje y hasta que se inauguró la estatua del héroe en 2003 realizábamos el acto en la fachada del edificio. Es una tradición que no queremos perder», añadieron desde el Círculo Cultural ‘El Empecinado’.
El recorrido continuó de vuelta a la plaza para realizar la entrega de las Medallas de El Empecinado 2019: «El criterio seguido es agradecer a personas o instituciones que se han distinguido por la defensa y memoria de El Empecinado», añadió el Círculo Cultural. Así, se entregó este símbolo conmemorativo a la Feria de Valladolid, la Cofradía de la Vera Cruz de Roa de Duero –la que acompañó a El Empecinado en su última noche –, a la Asociación Libre Albedrío de Cogolludo y al periodista Carlos Flores.
Una de las novedades de este XX Homenaje fue la presentación de una publicación en formato cómic que recoge la vida del General, a cargo de Miguel Gómez y del ilustrador Agustín Garriga. Unas páginas que sumergen al lector en las peripecias del famoso guerrillero de la Guerra de la Independencia española contra el invasor francés.
Para finalizar el homenaje, se produjo una ofrenda floral junto a al monumento de El Empecinado que preside la plaza de Castrillo de Duero. Los grupos de la Asociación de amigos del Museo Militar de Burgos pusieron el broche de oro al acto con el lanzamiento de tres salvas de honor, para así recordar el cargo de Capitán General que recibió el héroe que paseó por las calles del municipio una vez fue ejecutado por defender sus ideales de libertad.