Licitadas en 7 millones de euros las obras para depurar el agua de La Cistérniga y parte de Laguna
El EDAR de Valladolid aglutina toda la depuración de los municipios del alfoz de la capital / También están incluidos la urbanización La Corala y el polígono industrial de Los Alamares en Laguna de Duero
Planta de depuración de aguas residuales en el Camino Viejo de Simancas.-J.M. LOSTAU
La Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Valladolid será la encargada de depurar las aguas de todos los municipios del alfoz de Valladolid. El último en sumarse será La Cistérniga, después de que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente licitara ayer las obras de construcción del emisario de aguas residuales por un valor de 7 millones de euros y el plazo de presentación de ofertas permanecerá abierto hasta el 28 de agosto. También están incluido en el proyecto, la urbanización de La Corala y el polígono industrial de Los Alamares, en Laguna de Duero, que dejarán de verter sus aguas en el río Duero para hacerlo en la depuradora de la capital.
En total serán más de 32.000 habitantes los que se beneficien de esta nueva obra, cuya adjudicación de los trabajo se prevé para finales de septiembre y cuentan con un plazo de ejecución de dos años. En la práctica, supone que aún habrá que esperar dos años para que se haya completado la conexión con el colector que desemboca en la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales), ubicada en el Camino Viejo de Simancas.
Mediante los acuerdos adoptados entre las administraciones para la financiación, ejecución y gestión de la construcción del sistema de colectores, así como del mantenimiento del emisario, La Cistérniga se ha comprometido a sufragar 813.397 euros del coste y, en el caso de Laguna de Duero para los dos núcleos aún pendientes, la aportación se cifra en 112.503 euros. El resto se acometerá con fondos autonómicos, si bien ambos enclaves abonarán una cuantía anual durante un periodo de 25 años a Somacyl por el mantenimiento de la infraestructura.
El diseño del proyecto de esta infraestructura contempla un entramado de tuberías y colectores que permitirán conectar el emisario desde la Cistérniga hasta la EDAR de Valladolid y que, a su vez incorpora, mediante distintos colectores, las aguas residuales procedentes de La Corala y el Polígono de los Alamares.
La conexión de La Cistérniga era la única que estaba pendiente de ejecutar, después de que, poco a poco, se hayan ido materializando las obras en el resto de municipios del área metropolitana que habían acordado ‘engancharse’ a la depuradora de la capital como solución para garantizar el tratamiento adecuado de los vertidos.El pasado año se pusieron en marcha las instalaciones en Simancas para que dejase de verter a la red hídrica sin un filtrado previo. Anteriormente Arroyo de la Encomienda se unió a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la capital vallisoletana en julio de 2017.
Desde principios de 2016 está operativo también el entramado para conducir las aguas residuales de Zaratán hasta la planta ubicada en el Camino Viejo de Simancas y desde septiembre de 2015 funciona la red desde Laguna de Duero, el primer pueblo en conectarse. Así, los siete millones de euros presupuestados en esta licitación se suman a los alrededor de 20 invertidos en el alfoz vallisoletano en los últimos años en la ejecución de los conductos desde Simancas, Arroyo, Zaratán y Laguna, una cuantía que se eleva si se tiene también en cuenta el desarrollo de los proyectos.
EL COLECTOR
El colector a La Cistérniga consta de hormigón armado de 1.200 milímetros de diámetro, con una longitud de 400 metros y una pendiente del 0,4 %, con capacidad para conducir el caudal máximo procedente del colector existente aguas arriba hasta el tanque de tormentas. El proyecto incluye también el tramo común del mismo con la conexión del polígono industrial de La Mora, que deberá disponer de capacidad para los caudales de ambas conducciones.
En cuanto al colector de conexión del polígono industrial de La Mora, se ha planteado un colector de una longitud de 755 metros, también de hormigón armado de 1.200 milímetros, con una pendiente a lo largo de todo él del 0,2%. Por lo que se refiere al colector de conexión de La Corala, la obra consiste en bloquear el colector existente que vierte a un arroyo directamente, ajustar el perfil del mismo y librar el arroyo, hacer un paso por encima y poder llegar a verter al nuevo emisario de La Cistérniga, después del nuevo tanque de tormentas.
En Laguna, el tramo más largo y complicado será el de los casi dos kilómetros que transcurren en paralelo a la autovía, sobre todo en el tramo situado entre la ampliación del polígono de San Cristóbal y la factoría de Renault porque, al tratarse de una franja con escasa pendiente, será necesario excavar una zanja de en torno a ocho metros de profundidad. Tendrá también una repercusión directa en la industria de fabricación de automóviles. al sufrir ahora problemas de saturación.