Diario de Valladolid

Mojados, la villa que vio nacer un imperio

Cientos de personas acompañaron a la comitiva Real de Carlos V en el encuentro con sus hermanos / Los jóvenes de la villa que acaban de cumplir la mayoría de edad interpretaron a los protagonistas

Carlos V a su llegada ayer a la villa de Mojados donde sus hermanos renunciaron al trono.-J.M. LOSTAU

Carlos V a su llegada ayer a la villa de Mojados donde sus hermanos renunciaron al trono.-J.M. LOSTAU

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ELVIRA G. VELICIA / MOJADOS
Valladolid

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Ataviado de color dorado y enfundado en una pelliza casi del mismo color llegó Carlos V a lomos de su caballo a la villa de Mojados. Un hombre que pisaba por primera vez Castilla y que eligió esta localidad como el enclave perfecto para conocer a sus hermanos Fernando y Leonor. En la villa Carlos V vivió uno de los momento más importante de su vida, la renuncia por parte de su hermano al trono que permitió ser coronado Rey de España.

Los hijos de Juana I de Castilla y Felipe el Hermoso, eligieron darse cita en esta localidad, por aquel entonces segoviana, por su cercanía a la capital, sus pequeñas calles y por no contradecir a la Iglesia. El Obispo de Segovia quien residía en la localidad insistió para que Mojados fuera el lugar que viera nacer al imperio.

Carlos V apareció de nuevo ayer a lomos de su caballo por las calles de la villa. Mojados lleva 12 años recreando este momento histórico para recordar la importancia de sus localidad.

Esta recreación histórica es sin duda uno de los momentos que más turismo atrae del año, y así se demostró ayer. Cientos de personas se congregaron en las calles de la villa engalonadas con trajes de época, como no podía ser de otra manera, para retroceder unos cuantos siglos y vivir en aquel 1517.

Arropado por la corte, las figuras eclesiásticas, el pueblo llano y acompañado de su comitiva Carlos V aterrizó a las 22.00 horas. Llegó hasta la Plaza de San Juan, lugar donde se había citado con su hermano el infante Fernando, quien como no podía ser de otra manera también llegó junto a su séquito. Una de las comitivas llegó desde el puente viejo y la otra vino desde un punto cercano a la carretera de Madrid .

Con todos los ojos puestos en la Plaza de San Juan, llegó el momento más importante, Carlos V, interpretado por el joven mojadense Pablo Silva Hernádez, se encontraba por fin con su hermano Fernando, interpretado por Abraham Catalina Hidalgo y su hermana Leonor, a la que dio vida Patricia Hernández Román.

Como es tradición, son los jóvenes que cada año cumplen la mayoría de edad los encargados de dar vida a los tres personajes principales, y a parte de los soldados y las damas que les acompañan en la comitiva.

Pablo Silva comentó momento antes de fundirse en la piel de Carlos V, que era «todo un orgullo representar a Carlos V, quien fue el personaje más importante que pasó por al villa de Mojados» y que se había estado durante semanas preparando el personaje. «Me he visto vídeos de las anteriores ediciones de la representación y he leído también información sobre Carlos V para hacerlo lo mejor posible».

El joven Pablo estuvo semanas estudiando sus frases junto a sus compañeros para volver a dejar a la villa con un buen sabor de boca y un recuerdo posotivo de aquel tiempo ‘dorado’.

Como fue la ropa de Carlos V, un atuendo que se lleva luciendo tres años seguidos y que pertenece a la colección del Taller de costura de la localidad, quien presta cada año a muchos vecinos el vestuario necesarios para poder lucirlos en esta ‘histórica’ ocasión.

Con toda una villa en silencio y mirando a los ‘hermanos’ llegó el momento más esperado, la renuncia al trono de Fernando de Hasburgo en favor a su hermano. Carlos a su vez impuso a Fernando el Toisón de Oro como reconocimiento.

A parte de los papeles principales interpretados por los ‘quintos’, el grupo de teatro local ‘La Tramoya’, también ayudó con alguna interpretación y asociaciones de localidades como Tazones, Lastres o Medina del Campo animaron con músicas y bailes el encuentro de la familia Hasburgo.

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