Viana recupera a la vez la Virgen y el Cristo
Una réplica de la Milagrosa sustituye a la robada la pasada semana y la talla del XVII vuelve restaurada
Vecinos se congregan junto a la hornacina en la colocación de la Virgen.-EL MUNDO
Que Dios aprieta pero no ahoga, dicen. Que cuando cierra una puerta, abre una ventana.Que devuelve el ciento por uno. En esa misma línea Viana de Cega, que perdía hace diez días una imagen objeto de devoción en el pueblo, recuperó ayer dos. Por un lado, la réplica de la Virgen de la Medalla Milagrosa, prácticamente sin valor, robada en la madrugada del pasado miércoles, día 3. Por otro, la más importante, el Cristo de la Vera Cruz, del siglo XVII, recién concluida su restauración.
El miércoles de la pasada semana los vecinos se levantaron con el disgusto de que la réplica de la Virgen había sido sustraída de su hornacina junto al Parque de la Resinera. Según los primeros indicios, unos ‘cacos’, creyendo que se trataba de una talla de valor, actuaron en la oscuridad de la noche, limpia y silenciosamente, con una cizalla y una palanca. No causaron destrozos. Las hipótesis apuntan a que pretendían vender cara la talla en el mercado negro.
Pero no sabían que se trataba de una réplica de la original, guardada en la iglesia. Una talla de escayola de apenas 90 euros. No hubo problema: el cura le ofreció al alcalde que la parroquia se haría cargo de comprar otra nueva, como señal de agradecimiento por la restauración del Cristo del siglo XVII costeada por el Ayuntamiento.
En la tarde de ayer se dio cumplimiento a tan grato ‘intercambio’. Primero, los vecinos se congregaron junto a la hornacina del Parque de la Resinera, para acudir a la colocación de la imagen de la Virgen de la Medalla Milagros. El acto contó con la bendición del sacerdote titular. Después, la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora se vistió de gala para recibir, con un Vía Crucis y una marcha procesional, la talla del Cristo de la Vera Cruz, del siglo XVII, atribuido a la Escuela Castellana.
Pese a que se conservan pocos datos de la iconografía de Viana de Cega, y que la parroquia se encuentra ahora en un edificio construido hace sólo 54 años, los registros hablan de dos crucifijos que aún se conservan. Se cree que el recién restaurado es el «Santo Cristo» que en el siglo XVII presidía uno de los altares que se ubicaban en la antigua iglesia, junto al río, derribada en los sesenta.