Alaejos proyecta un centro para aficionados a la lidia

El diestro vallisoletano Pablo Santana promueve un centro de interpretación de la tauromaquia en Alaejos, en la misma finca donde instaló hace dos años una plaza de tientas de uso recreativo. Desde ese momento, la actividad relacionada con el toreo no ha dejado de crecer en el lugar. Una animación que le ha llevado a plantearse nuevas posibilidades.

Así, el joven matador de 28 años, que siempre se ha considerado Alaejano por sus vínculos con la localidad, inició hace meses los trámites para convertir su ‘parcela recreativa’ en algo más. Comenzó con la redacción de un proyecto, que sigue su curso y que inició el pasado 24 de mayo su periodo de información pública.

La infraestructura es modesta pero efectiva. Prevé construir una pequeña edificación junto a la plaza de tientas, de sólo 90 metros cuadrados. Lo suficiente para instalar un aula que sirva también de sala de audiovisuales, un baño, un vestuario, una sala polivalente y un almacén. La inversión también será modesta, sobre todo comparada con las ganas y la ilusión que muestra el torero: 40.000 euros, que se suman a lo ya invertido con el valor de la finca, de 4.521 metros cuadrados, y la plaza de tientas.

«Desde que instalamos la placita con su palco, en esta pequeña finca, acude un montón de muchachos a practicar», explicó en respuesta a este periódico PabloSantana. «Mi propuesta era construir un espacio donde se puedan cambiar los muchachos, una sala de diapositivas, para poder explicar la teórica y la práctica, e intentar, con el tiempo, crear una escuela de tauromaquia».

«Vamos a ver si lo conseguimos, con un poquito de ayuda y muchas ganas», deseó. «Lo ideal sería poder llegar a abrir una escuela taurina para ayudar a los más jóvenes, ya que sólo hay dos escuelas en Castilla y León: una en Medina de Rioseco, y otra en Salamanca». Curiosamente, Alaejos se encuentra casi en el centro de ese eje.

Aspirantes de muchos puntos de España se acercan con asiduidad a Alaejos, para acudir al coso y al consejo de Santana. «Vienen mucho, por ejemplo, un muchacho de Quito, Ecuador, afincado en Madrid; otro de Burgos, que entrena conmigo», afirma. «Los llevo al campo, por diversos lugares de la provincia de Salamanca; los intento pulir; que no se precipiten...». Se trata de transmitir un arte, poco a poco, para que puedan «avanzar en esta carrera tan complicada».

Pablo Santana nació en Valladolid en 1989, pero tiene una estrecha vinculación con Alaejos. «Creo que mi misión es abrir la puerta a todo el mundo que quiere ser torero», dice. «Llevarlos a bolsines taurinos, acompañarlos... pero sin tener la escuela taurina tampoco puedo ocuparme tanto», lamenta. «Requiere mucho tiempo, un horario... y yo hago en la medida que puedo».

Tiene claro que si algún día abre la anhelada escuela taurina (siempre, dice, con un respeto total a las escuelas de Medina de Rioseco y Salamanca), desarrollaría su labor como director, pero también debería contar con otro matador que ejerciera de profesor, un preparador físico y federarla, entre otros requisitos. «Por eso pediremos apoyo a la Junta de Castilla y León, y a la Diputación», concluye.

A juicio del matador, la ubicación de Alaejos, junto a la provincia de Salamanca, es un punto a favor de una futurible escuela taurina. «Si entrase en funcionamiento la escuela, habría que llevar a los alumnos al campo, y para eso nada mejor que la provincia de Salamanca. Sería un factor muy importante de cara a los tentaderos». Por otro lado, recuerda, «Salamanca y Sevilla son las dos provincias de España que más ganaderías tienen».

En cuanto al edificio que, por ahora, funcionará como centro de interpretación de la tauromaquia, «cuenta con un pequeño salón para meriendas, o para algún evento, alguna fiesta...». Un proyecto, en fin, en el que tendrá que invertir dinero, pero cuyo resultado «no tiene precio», asegura, porque requiere mucho de su esfuerzo.

Santana debutó con picadores en Cáceres en 2011, hizo su presentación en la plaza de toros de Las Ventas en 2013 y tomó la alternativa el mismo año, en Mojados.

«Poco a poco la afición se está recuperando»

Santana deplora el escenario actual de la tauromaquia en España, un sector que «está como está», dice. «Un matador en muchas ocasiones tiene que jugarse la vida en la plaza por una retribución mínima, o no ir». «Mucha culpa la tiene el tema de los antitaurinos, y que se ha reducido el número de festejos un 25 ó 30%». Sin embargo, ve un rayo de esperanza. «Ahora parece que poco a poco se están recuperando de nuevo los espectáculos taurinos, pero hemos pasado unos años muy fastidiados, en los que nos han quitado los toros en Cataluña, por ejemplo, y han intentado hacer lo mismo en el País Vasco».

Y en ese escenario comienza un periodo, el segundo semestre del año, en el que la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla yLeón, Josefa García Sirac, se comprometió a poner en marcha la Cátedra de Tauromaquia de Castilla y León de Estudios Interdisciplinarios, concebida «como un ámbito institucional abierto a la participación del conjunto de las Universidades de la Comunidad Autónoma, dedicado a la docencia, la investigación y la divulgación científico-técnica y cultural sobre la tauromaquia», anunció.

Quizá sea el momento de impulsar también, por parte de las instituciones, centros taurinos donde se conjugue la teoría y la práctica, como el que pretende abrir sus puertas en Alaejos. La Junta ha impulsado, también, la Mesa de la Tauromaquia de Castilla y León, creada en 2014 como órgano de representación de la totalidad del sector, con el objetivo de que realice funciones de asesoramiento y propuesta a la Administración autonómica en esa materia, con carácter pluridisciplinar.