Diario de Valladolid

El Ayuntamiento de Valladolid asume el derribo del Arco de Ladrillo pero pide que se corrija el proyecto del túnel

El concejal Ignacio Zarandona insiste en que el nuevo paso subterráneo que se construya debe ser compatible con el soterramiento / El PSOE acusa a Carnero de "intentar boicotear" la integración ferroviaria "al cuestionar los estudios técnicos"

Viaducto del Arco de Ladrillo en su acceso desde el Paseo del Hospital Militar.- J. M. LOSTAU

Viaducto del Arco de Ladrillo en su acceso desde el Paseo del Hospital Militar.- J. M. LOSTAU

Publicado por
Fernando Martín
Valladolid

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El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Valladolid, formado por el PP y Vox, asegura que  es favorable al derribo del Arco de Ladrillo para construir en su lugar  un paso subterráneo que absorba el paso de vehículos que ahora circulan por el viaducto, pero, mira por dónde, el proyecto  básico presentado por el Administrador de Infraestructuras Ferroviaria, Adif, para  hacer eso mismo no les gusta.

Tras examinar los técnicos municipales el proyecto básico enviado por la Sociedad Valladolid Alta Velocidad el pasado mes de diciembre, con un coste de 343.000 euros,   el concejal de Urbanismo, Ignacio Zarandona, anunció este miércoles que el documento contiene «defectos inaceptables» y  pedirán que se corrija y se introduzcan las modificaciones que permitan que el paso subterráneo sea compatible con el soterramiento , que el equipo de gobierno municipal pretende rescatar.

El derribo del viaducto del Arco de Ladrillo, construido a mediados del siglo pasado, y su sustitución por un túnel mixto para peatones, vehículos y bicicletas está entre las 17 actuaciones contempladas en el proyecto de integración del tren a su paso por Valladolid. En lugar del viaducto actual, la previsión es construir un túnel para el tráfico rodado con cuatro carriles, dos en cada sentido, y a su lado un paso peatonal y ciclista que estaría descubierto . Al anunciar el proyecto, el ex alcalde Óscar Puente dijo que  las obras saldrían a licitación en 2024 y estimó que el coste previsto oscilaría entre 10 y 15 millones de euros.

El proyecto definitivo tiene que entregarse en mayo, pero habrá que ver si las reclamaciones del Ayuntamiento son atendidas. Entre los defectos «inaceptables», el concejal de Urbanismo citó el hecho de que el túnel para vehículos está diseñado  en forma de curva en sus extremos, un trazado que considera «inadecuado en cualquier caso de vía» , pero más todavía en una con dos carriles en cada sentidos. Zarandona añadió que este diseño en doble curva es inadecuado también por motivos de seguridad «dadas las dificultades visuales que experimentan los conductores al entrar en el túnel ante el cambio del nivel de iluminación».

 La pendiente de las rampas del túnel, con una inclinación del 9% cuando, según el concejal, el máximo debería ser un 7%,  y la velocidad máxima  de 40 kilómetros que se contempla en el proyecto, cuando  en vías urbanas  está permitido circular a 50 kilómetros por hora, están entre los defectos que el Ayuntamiento considera necesario subsanar. Y un problema más todavía.  El edil advirtió de que  para encajar los cuatro carriles destinados a vehículos, más el paso peatonal y el de bicicletas, se han «tomado las anchuras mínimas» que exige tanto el PGOU como la normativa de Carreteras y puso en duda en el espacio disponible pueda construirse todo lo previsto.

 «Ha sido una sorpresa que el proyecto fuera inaceptable», dijo Zarandona y añadió que «hay que retocarlo», lo que podría alargar las previsiones para el derribo del Arco de Ladrillo, aunque el concejal matizó que «en 2024 no hay nada consignado para las obras de este nudo» y descartó que el viaducto implique riesgo alguno, aunque sí necesita «arreglos recurrentes». 

Pese a la petición para que se corrija el proyecto, el responsable de Urbanismo quiso dejar claro que no están « en absoluto en desacuerdo con que se haga la obra», es decir que están de acuerdo en que se derribe el viaducto y se construya un paso subterráneo para los vehículos, pero insistió en que debe modificarse  y, además, debe hacerse de manera que no impida llevar a cabo el soterramiento si algún día se recupera el proyecto. Zarandona se mostró confiado en que a mediados de este mes tengan respuesta a su petición de reunión del consejo de Administración de Valladolid Alta Velocidad, donde pretenden plantear la recuperación del soterramiento.

Donde el equipo de gobierno ve «defectos inaceptables», el  Grupo Municipal Socialista aprecia  «una maniobra dilatoria para impedir la ejecución de obras que mejorarían la movilidad y la comunicación en la ciudad» . El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Pedro Herrero, responsabilizó a Carnero porque «está intentando boicotear la integración ferroviaria cuestionando los estudios técnicos» y recordó la propuesta defendida por el PSOE en el Pleno, rechazada por el Partido Popular y Vox: «Lo que está intentando el señor Carnero, consciente de que el pasillo se le estrecha, es poner excusas y pretextos para no hacer nada y no dejar que se haga nada».

El también concejal socialista Luis Vélez tachó de «error» el cuestionamiento de los técnicos que han realizado ya el trabajo y ha solicitado al Ayuntamiento «lealtad y colaboración» con las instituciones para que esta infraestructura se ejecute y mejore la movilidad integral de toda la zona. «Es un proyecto que no tiene marcha atrás, porque antes del verano deberá de estar concluido el proyecto definitivo»,  añadió el anterior responsable de Movilidad y Espacio Urbano.

El PSOE insistió en que el entorno del Arco de Ladrillo precisa de una transformación para solucionar de forma definitiva uno de los puntos más problemáticos de la ciudad y piden «que se acelere el proyecto que contempla la demolición del viaducto y su sustitución por un amplio paso subterráneo con capacidad para vehículos, ciclistas y peatones».

También desde Valladolid Toma la Palabra, su concejal Jonathan Racionero pidió al equipo de gobierno  municipal que «deje de boicotear la integración ferroviaria» con «excusas».

Tras  señalar que la revisión planteada por Zarandona puede retrasar el proyecto de Arco de Ladrillo, una actuación que entiende «urgente» , reclamó al alcalde que  « se deje de excusar en aspectos técnicos y se comprometa a realizar las obras de Arco de Ladrillo más allá de anuncios en prensa para hacer ruido con la eterna promesa del soterramiento, tratando de desacreditar una solución real y factible como ha demostrado ser la integración ferroviaria».

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