Vía libre a los pisos tutelados en el antiguo chalé de Parquesol de Valladolid derribado hace siete años

Los 24 pisos tutelados para mayores que se construirán en el antiguo chalé  de Antonio Alfonso, la imponente mole de hormigón que dominaba la ladera sureste de Parquesol, derribada en 2016,  ya están a la venta después de siete años de trámites para empezar las obras y una vez que la junta de gobierno del Ayuntamiento diera ayer el visto bueno definitivo tras cerrar el último fleco suelto.

     Lo que ayer se aprobó por el Ayuntamiento es la urbanización del entorno, que incluye un intercambio de suelo, mediante el cual la empresa propietaria de los terrenos, Gastronoteca, cede 2.869 metros cuadrados que se incorporan al parque de Los Almendros, a cambio de obtener  un acceso por Parquesol. El proyecto de urbanización contempla  una zona de aparcamiento en batería en la calle Luis González Lefort. El coste estimado de la urbanización es de 225.000 euros, a cargo de la empresa.

    Una vez conocida la decisión de la junta municipal, la inmobiliaria Metro puso en marcha la maquinaria para vender los apartamentos -de hecho ya ayer hubo alguna reserva- con precios que estarán a partir de los 188.000 euros que costarán los de la tercera planta, aunque hasta que no estén adjudicados la mitad, al menos, no empezarán las obras.

      La previsión de la empresa es que los  trabajos se prolonguen dos años y la inversión prevista ascenderá a 4,5 millones de euros. La venta se gestionará en régimen de cooperativa para limitar los costes, según fuentes de la empresa.

     En el transcurso de la tramitación, los promotores modificaron el proyecto inicial, de manera que los 24 apartamentos, repartidos en tres plantas, tendrán vistas al barrio de Arturo Eyries y al río Pisuerga .  Con la planificación anterior, el edificio tenía forma de ‘L’ y 16 apartamentos que miraban a Arturo Eyries, mientras los 8 restantes se asomaban a Parquesol, aunque estaban elevados  para que el edificio de la residencia Ballesol no impidiera las vistas. 

    La superficie útil de cada apartamento será de 50 metros cuadrados, además de 32 metros de terraza,  y los de la segunda planta dispondrán también de un solariun de 50 metros. En el caso de los ubicados en la planta baja, contarán con un patio o jardín de 140 metros cuadrados de uso privativo.

    El comienzo de las obras pondrá fin a uno de los capítulos urbanísticos que más quebraderos de cabeza dio al Ayuntamiento hasta la demolición del antiguo chalé hace siete años.   Fue el constructor Antonio Alfonso el que  empezó a levantar en 1978 un chalé de 7.000 metros cuadrados en la ladera de Parquesol que da la Avenida de Salamanca. 

Tras paralizarse las obras en 1983 , dos años después, en 1985, se aprobó una modificación del plan parcial Parquesol, pero por razones que nunca se supieron la parcela que ocupaba el chalé, la número 63, se quedo sin edificabilidad: no podía construirse nada. El chalé y el resto de los terrenos de la parcela quedaron en una especie de limbo judicial.

Propiedad del Grupo Foxá desde 1988, desde el Ayuntamiento se intentó negociar una salida, aunque sin resultados. Incluso se ofreció una posible permuta por un solar municipal, pero el Grupo Foxá pidió además una elevada compensación económica que el Ayuntamiento consideró en su momento desproporcionada al superar el precio de mercado del suelo. Ya entonces se instó a los propietarios a derribar el edificio dado que en la parcela no se podía construir, aunque sin éxito . Así pasaron los años hasta que en 2014 el Ayuntamiento anunció que se iba a estudiar la declaración de ruina para derribar el chalé.

En el pleno del Ayuntamiento de 7 de mayo de 2015, el último que presidió el exalcalde Francisco Javier León de la Riva, se aprobó una modificación del Plan General de Ordenación Urbana que restauraba la edificabilidad y desbloqueaba la situación de la parcela.

La modificación consistió en dar un uso dotacional a los 1.530 metros cuadrados que ocupa el edificio, sin incrementarse la edificabilidad, además de abrir  un acceso a la parcela desde la calle Luis González Lefort dado que se encontraba sin salida. 

Con la llegada de un nuevo equipo de gobierno municipal, el Ayuntamiento volvió a la carga para derribar el chalé. Los técnicos del Servicio de Control de la Legalidad Urbanística constataron que el edificio estaba en una situación de ruina crítica e irreversible y en diciembre de 2016 se derribó .. .

Aunque en su día se especuló con la posibilidad de que sociedad Gastronoteca Valladolid, propietaria de los terrenos, levantara un complejo hostelero , al final  la licencia se pidió para apartamentos destinados a personas mayores. La solicitud se estancó, sin embargo, en la siempre compleja tramitación urbanística y en junio de 2021 el Ayuntamiento aprobó un decreto de inadmisión. La decisión de ayer pone fin al largo proceso.