Renfe mantiene lleno y sin distancia el Avant a Madrid en plena segunda ola
El PP pregunta al Gobierno si lo que ocurre en el tren es «ejemplarizante para detener la pandemia» ya que los viajeros van sentados «codo con codo, a diez centímetros»
Martes, 10.23 horas de la mañana. En la página web de Renfe, se rellenan los datos solicitados con la intención de comprar un billete de ida y vuelta Valladolid-Madrid para el miércoles a las 6.23 horas . Malas noticias, tren completo.
«Vamos completamente abarrotados. No existe la posibilidad de la distancia de seguridad, estamos unos en frente de otros», relata el presidente de la Asociación de Usuarios de AVE de Valladolid, Carlos Perfecto.
Se suman a la queja los senadores del Partido Popular por Valladolid Mercedes Cantalapiedra y Luis Alberto Plaza. Argumentan que en el AVE se viaja sin guardar las medidas de seguridad, que nadie controla la estación de Chamartín, que los viajeros del Avant Madrid-Valladolid iban sentados codo con codo con el pasajero de al lado y que estaban a diez centímetros de distancia unos de otros. Cantalapiedra pregunta al Ministerio de Sanidad si lo que ocurre «es ejemplarizante para detener la pandemia».
Toda esta polémica se fragua al mismo tiempo que Renfe ‘saca pecho’ por haber obtenido la certificación de AENOR frente a la COVID-19 para el transporte de viajeros. «Destacan la limpieza exhaustiva de la flota antes de iniciar las circulaciones, procedimientos extraordinarios de desinfección cada cinco viajes, mantenimiento de la limpieza en ruta y renovación continuada del aire de los coches, entre otros aspectos», señala el comunicado de la empresa ferroviaria.
En las antípodas se encuentran las experiencias de los usuarios en los vagones durante las horas más solicitadas, que suelen ser las cuatro primeras de la mañana y las cuatro últimas de la tarde.
«La gente tiene que ir a trabajar, pero dado como están las cosas, con seguridad. Verónica Casado y Francisco Igea han mandado al ministro de Fomento, hace dos semanas, la carta sobre las cuestiones de frecuencias, de más asientos... No han contestado», lamenta Perfecto.
En la carta se le pedía a José Luis Ábalos que redujese la ocupación de los trenes en un 50% para todas las conexiones con Madrid. Destacaban que era «imprescindible» prohibir la comida y la bebida en los trayectos de corta y media distancia, «manteniendo el uso obligatorio de la mascarilla en todo momento».
«Si estás viendo desde hace una semana, que la ratio que tienes de ocupación es un 80 ó 90%, ¿por qué no pones doble composición? ¿Por qué se recomienda el uso de mascarilla en todo el transporte público pero en el Avant y en el AVE se permite comer y beber sin ella? Si yo mañana me contagio en el tren, ¿quién es el responsable? Nadie, porque Renfe te ha dicho que se puede comer y beber ¿Entonces por qué han quitado los coches restaurantes en larga distancia?» se pregunta Perfecto.
Añade que no puede comprender que estén a diez centímetros unos de otros , y más cuando la ciudad destino, o la ciudad origen, es Madrid , que está confinada. «Lo único que sabemos es que si intentas cumplir unas mínimas normas de seguridad interpersonal puedes evitar el virus, pero con diez centímetros, pegados, y uno comiendo el bocata al lado, evidentemente no».
Perfecto fija el foco en los políticos, tanto en José Luis Ábalos como en los gobernantes de la Junta, por no exigir «de manera imperativa» una respuesta. «Nosotros venimos de Madrid con posibles contagios, pero es como si en el Avant de Valladolid a Madrid no existiera el Coronavirus» , asevera. Asimismo, recuerda que desde la asociación siguen esperando por la modificación en la flexibilidad de los abonos.