El Pisuerga anega la ribera de Valladolid
La CDH reduce la previsión de una avenida mayor para Nochebuena / El pico máximo del cuadal supera los 1.200 metros cúbicos, lejos del máximo de 2001, de 2.730 metros cúbicos
Dos jóvenes sacan una foto a un Pisuerga desbordado a su paso por el puente de Isabel la Católica.-J. M. LOSTAU
Después de la crecida en el norte de Valladolid, ayer le tocó a la capital recibir el punto máximo de caudal del río Pisuerga. En su momento álgido, a partir de las 18.00 horas, el río superó los 1.200 metros cúbicos de agua al segundo. El volumen que bajaba era tal que la playa de Moreras se encontraba sumergida en su totalidad y buena parte de la ribera se encontraba borrada al paso de la avenida.
La cantidad de agua recogida por el Pisuerga a lo largo de su recorrido, proveniente de precipitaciones, deshielo y de sue sus afluentes -en especial los ríos Arlanza y Arlanzón- contribuyeron a ese pico máximo. En tan solo 24 horas, desde la tarde del sábado hasta el momento álgido, el caudal se multiplicó por tres hasta sobrepasar los 1.220 metros cúbicos por segundo -el nivel establecido de alarma- en la tarde de ayer. Pese al volumen alcanzado, éste está lejos de alcanzar los 2.730 metros cúbicos por segundo que se produjeron en la riada de 2001, una cifra récord que casi duplicó a la actual.
Durante la mañana de ayer visitar la crecida del Pisuerga se convirtió en una de las actividades que hacer. En la zona de la playa de Moreras y el paseo del Paseo de Marcelino Martín ‘El Catarro’, los curiosos se acercaban a la orilla para fotografiar una estampa curiosa y a la vez peligrosa ya que la bravura del agua arrastraba con ella grande troncos a una gran velocidad. Parte de esta madera se podía ver acumulada en los ojos de los puentes.
La ribera en su totalidad veía borrada sus márgenes habituales y esperaba a que la avenida se fuese retirando para volver a la normalidad. Cristina Danés, presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) indicó que la avenida remitiría en un plazo de 4 a 5 horas. Asimismo, Danés anunció que la avenida anunciada para este martes día 24, día de Nochebuena, no será tan grande como se había considerado días atrás.
La presidenta de la CHD trasladó la preocupación del ente por la situación del Duero, ya que será este río el que tendrá que absorber todo el caudal a partir de mañana. Danés trasladó que la crecida podría provocar incidencias en la comarca zamorana de Toro. Además, señaló que, desde la Confederación «estamos en vigilancia y coordinación con el Ayuntamiento de Valladolid y Protección Civil, que pone en marcha las medidas del Inuncyl».
Sobre las críticas de los últimos días que cargan contra la CHDpor no permitir la limpieza de los cauces de los ríos, Danés recordó, como ya hizo el sábado en su visita a la provincia de Palencia, que la competencia en acometer estos trabajos son de los ayuntamientos y deben de hacerlos «en condiciones medioambientalmente correctas». La presidenta ofreció la ayuda del personal y los guardas mayoresde la Confederación, puesto que que son éstos los que «indican cómo hacer» las limpiezas.
Sobre los reproches de Conrado Íscar, presidente de la Diputación de Valladolid, a este respecto, Danés sostuvo que «nos hemos puesto a disposición de las diputaciones porque tienen que ayudar a los pueblos pequeños. En ese espíritu de colaboración trabajamos».
Danés visitó ayer el río Pisuerga a su paso por Valladolid, en la zona de las Moreras, junto al alcalde de la ciudad, Óscar Puente, y al concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, José Antonio Otero. El regidor quiso agradecer la cooperación de la CHD y señaló la precisión de los modelos remitidos por la entidad al estarse cumpliendo. «Se nos avisó de una crecida de estas características para esta tarde y así es», señaló.
Puente quiso llamar a la ciudadanía a la «calma» y a la «cooperación» debido a un temporal que junta lluvias, la crecida del río y un fuerte viento. Todo ello, expuso, ha hecho que «se redoblen esfuerzos». Asimismo agradeció el trabajo de la Policía, Protección Civil y de los Bomberos por el trabajo «espléndido»al velar para que «la ciudad sufra las menores consecuencias posibles de las circunstancias climatológicas que estamos viviendo».
Durante el día de ayer, los Bomberos de Valladolid recibieron 24 llamadas -frente a las 79 del sábado- para intervenir. Prácticamente todas, fueron relacionadas con el tiempo debido a la caída de árboles y tejas sin que haya habido que lamentar daños personales o materiales. El concejal de Seguridad, recordó a la población que para evitar este tipo de desprendimientos hay que evitar hay que asegurar objetos de las ventanas y terrazas.