El PP recupera la Diputación de Soria de la mano de sus exsecretarios y de Ciudadanos

No hubo sorpresas de última hora y el PP recuperó ayer el control de la Diputación de Soria gracias a un pacto cerrado horas antes de la toma de posesión con Ciudadanos y la Plataforma del Pueblo Soriano (PPSO), un partido formado por exdirigentes del PP de Soria. El acuerdo, impulsado por la dirección nacional del PP, permitió acceder a la presidencia al alcalde de la localidad de Golmayo, Benito Serrano. El nuevo presidente tendió la mano al PSOE en un intento de frenar la crispación suscitada tras desbancar de la presidencia a Luis Rey y solicitó «altura de miras» para afrontar los retos que debe afrontar la provincia.

El pacto entre PP, PPSO y Cs fue suscrito ante notario y permitió al candidato popular sumar los 13 votos que otorgan la mayoría absoluta en la Diputación de Soria (Nueve del PP, tres de PPSO y uno de Cs). El acuerdo ha sido apadrinado por la dirección general del PP, mientras en Soria se estaba buscando un acuerdo con el PSOE a cambio de la presidencia de varias comisiones y supone además abrir la puerta a los sorianistas para que regresen al PP de donde salieron, entre ellos José Antonio de Miguel y Antonio Pardo, ambos ex secretarios del PP soriano, o a María Jesús Ruiz, la que fuera vicepresidenta de la Junta de Castilla y León. Asimismo, la PPSO ocupará una vicepresidencia y Cs otra.

Media hora antes del inicio de la sesión un grupo unas 70 personas convocadas por el PSOE protestaron frente a la fachada de la Diputación soriana para protestar por el pacto liderado por los populares. Esa «quedada» para el PSOE y «escrache» para el PP coincidió con la comparecencia pública de la presidenta del PP soriano, Yolanda de Gregorio, escoltada por Benito Serrano y el responsable de Acción Local de la dirección nacional, Antonio González Terol, una de las personas claves en la negociación con la PPSO. Arropada ayer, la presidenta del PP soriano queda tocada después de que Génova impusiese el pacto con los sorianistas en contra de su criterio y, además, la apartara de la carrera por presidir la Diptuación.

El nuevo presidente explicó que tras los resultados del 26-M y el pacto entre PP y Cs por el Gobierno regional en Soria se «reedita» ese acuerdo «sumando» a la PPSO, una partido «surgido de las entrañas del PP». Este nuevo Gobierno «viene a trabajar por el futuro de Soria y por todos sus pueblos sin distinción de color político». Serrano avanzó un «periodo de colaboración institucional» con la Junta y aseveró que será «combativo» para mejorar el futuro de la provincia.

El presidente provincial puso el foco en el problemas de la despoblación y apuntó que la repoblación «debe ser el objetivo prioritario» junto a «la batalla por garantizar el bienestar de todos generando oportunidades de empleo». Soria se merece avanzar y en ese camino estaremos» aseguró por lo que solicitó a la nueva corporación «altura de miras, ayuda y responsabilidad». «Busquemos la Soria que merecemos y reclamemos la Soria que deseamos», subrayó.

Serrano defiende que el acuerdo que le ha aupado a la Presidencia reúne a «tres sensibilidades diferentes» y exhortó a «trabajar juntos». A sus socios también les prometió «dejar lo mejor de mí» e invitó al PSOE a «trabajar como siempre lo han hecho en aras del interés común». «Sé que puedo contar con vuestras aportaciones y os tiendo la mano para trabajar juntos». En su presentación Serrano también ofreció «diálogo sincero» y «trabajar con humildad» con el objetivo de «mantener y mejorar» los servicios en los pueblos.

El presidente también llamó la atención sobre la necesidad de adaptarse a los «nuevo retos» que se aproximan a través de la innovación y la adaptación las nuevas tecnologías. En este campo reconoció que hay otra cuestión «fundamental» que pasa por «conjugar» la calidad de vida que ofrece la provincia con los nuevos servicios.

CS confirma que solicitó permiso a madrid para abstenerse

Uno de los principales protagonistas de la sesión de investidura en la Diputación fue el único diputado de Ciudadanos, Saturnino de Gregorio. El papel de la formación naranja ya se antojaba clave una vez se conocieron los resultados y es que en su mano estaba la posibilidad de decantar la balanza del Gobierno provincial en favor del PSOE o del pacto entre la PPSO y el PP. El propio De Gregorio reconoció ayer que Cs Soria apostaba por la abstención -que hubiera dado el Gobierno al PSOE–, pero que el mandato de la dirección nacional fue claro.

Más tranquilo que en la víspera, el diputado lamentó las críticas socialistas y confirmó que ocupará una de las vicepresidencias. Con respecto a las críticas del PSOE , De Gregorio explicó que Ciudadanos Soria «pidió una autorización a Madrid para apoyar la investidura de Luis Rey con una abstención». «Eso es cierto, pero Ciudadanos no ha creído conveniente dar esta abstención y si apoyar un gobierno del PP, recalcó. El diputado justificó que «me debo a un partido» y lamentó que el PSOE «no ven en sus propias carnes lo que piden para los demás».