La Policía asegura que la madre mintió sobre cuándo llevó a Sara al médico
Davinia aseguró que había llevado la niña al médico el 28 de julio con un golpe en la cabeza, pero no supo responder a las preguntas de los agentes
Momento del juicio.-E.M.
El juicio volvió este miércoles a retomarse después del parón obligado por el fallecimiento la pasada semana del padre del presidente de la Audiencia Provincial de Valladolid, Feliciano Trebolle.
El juicio por el asesinato de la joven niña de cuatro años en agosto de 2017 en su casa de Rondilla continuó en el mismo punto en el que se dejó el pasado viernes, con la declaración de los Policías de la Unidad Familia que acudieron al hogar y que detuvieron a la madre de Sara, Davinia, y a la pareja de ésta, Roberto H.H., acusado del asesinato de la pequeña.
Los agentes declararon que Davinia les mintió cuando acudieron a la casa. Allí, donde presenciaron que Sara presentaba golpes en la cara “muy fuertes”, Davinia aseguró que llevó a su hija al médico el 28 de julio. Sin embargo, fue cuestionada por “qué médico era, en qué calle estaba, si era hombre y mujer… y no respondió”, aseguró uno de los agentes durante su declaración.
La versión de Davinia no concordaba con la de su pareja, Roberto H.H. Mientras que la madre dijo que Sara estaba con su presunto asesino en el momento en el que recibió los golpes, “él dijo no saber nada”, relatan los agentes. Tampoco ayudó a esclarecer lo ocurrido la hermana de Sara, Andrea, que no contestó a las preguntas policiales más allá de un escueto “Dejadme en paz”.
Una de las evidencias de cómo cambió la vida de Sara con la entrada en ella de Roberto H.H. está en las fotografías del móvil de Davinia. “Había 6.661 archivos de fotos. Antes del último mes se veía a Sara una niña alegre, riéndose y en el último mes era de una extrema tristeza”, relató uno de los agentes.