Diario de Valladolid

Un encarcelado por drogas, en la trama por trato de favores del guardia civil

El abogado de uno de los investigados: «Todo parte del conflicto entre la Policía y la Benemérita»

Comandancia de la Guardia Civil de Valladolid donde trabaja el agente y ha realizado obras un investigado.-C. S.

Comandancia de la Guardia Civil de Valladolid donde trabaja el agente y ha realizado obras un investigado.-C. S.

Publicado por
Íñigo Arrúe
Valladolid

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La ronda de declaraciones de empresarios investigados como beneficiarios de un presunto trato de favor con el agente de la Guardia Civil J.C.C. en temas como retirada de multas y eliminación de antecedentes penales, arrancó ayer en el Juzgado de Instrucción 1, con una sorpresa:en la lista de 18 imputados figura im detenido por tráfico de drogas el pasado 16 de mayo y posteriormente encarcelado.

Este hostelero ingresó en el centro penitenciario de Valladolid dos días más tarde junto con su hijo y un amigo de ambos tras descubrirse que guardaban 30.280 euros en metálico, 30 gramos de cristal (MDMA), 220 gramos de hachís, 60 gramos de cocaína, 18 gramos de marihuana, 2.300 gramos de sustancia de corte, siete gramos de heroína, una pistola de aire comprimido, dos revólveres simulados, un táser y tres vehículos que fueron intervenidos.

La sorpresa para el juez instructor fue que M.A.E.M. era uno de los interlocutores que mantenía conversaciones con el guardia civil J.C.C., según revelaron los pinchazos telefónicos del Cuerpo Nacional de Policía cuando trataba de lograr pruebas en la ‘Operación Rosado’ contra el clan de los Varela.

Aquellas grabaciones, efectivamente, lograron desmantelar el clan Varela a finales de marzo, con 47 detenidos por tráfico de droga y blanqueo de capitales, pero alertaron de una presunta conducta delictiva del guardia civil J.C.C. desde la Comandancia mediando, supuestamente a cambio de regalos y prebendas, para ‘distraer’ expedientes incómodos de sus conocidos. Y en esta lista está el hostelero encarcelado.

El juez citó ayer a siete de estos 18 supuestos beneficiarios del trato de favor –de Valladolid, Campaspero y Quintanilla de Onésimo, entre otras localidades– y hoy completará los interrogatorios en un clima de malestar común de los abogados defensores, porque entienden que las escuchas telefónicas no evidencian ningún hecho delictivo. «Mi cliente no ha declarado porque recibió el martes la citación y no ha tenido tiempo de encargar en condiciones su representación», aseguró la letrada de hostelero encarcelado.

«Me gustaría saber de qué se le acusa a mi cliente», agregó el abogado de otro hostelero investigado. «Se le ha metido en la lista porque es el dueño de un hotel al que iban otros investigados a comer. Esto no es serio, porque no hay nada contra él. ¡Es que ni aparece en las conversaciones!», se quejó.

Otro defensor fue más allá y aseguró que en el trasfondo de todo late un «conflicto entre el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil», que ha arrestado a las personas que en esas fechas hablaron por teléfono con el guardia J.C.C. «Son conversaciones privadas, a veces intrascendentes, que no encierran ninguna conducta delictiva. Esto no se puede permitir», dijo,

En la sesión de ayer declararon cuatro investigados, uno más lo hizo por videoconferencia y dos se negaron a declarar. A todos ellos el juez José María Crespo pidió que explicaran el contexto de las conversaciones grabadas con J.C.C. Según fuentes jurídicas, las preguntas del magistrado incidían en multas, regalos y en obras públicas.

Uno de los declarantes de ayer es propietario de una cantera, con una flota de una docena de vehículos y en las grabaciones conversa con el agente J.C.C. sobre una multa a uno de los vehículos. Otro de los que declaró es un empresario de la construcción del sector de estructuras metálicas, material y cubiertas. Del mismo modo declaró un hermano del principal investigado, guardia civil, que en 2013 fue condecorado por Protección Civil por rescatar a un paciente que se encaramó a un tejado de su vivienda en Quintanilla de Onésimo.

Otro de los citados a declarar es un constructor de la provincia que realizó obras en la Comandancia de Valladolid por una cuantía muy importante en diferentes zonas de edificios y del polvorín.

El agente, J. C. C., ya ha declarado en dos ocasiones ante el juez instructor por presuntos delitos de cohecho, negociaciones prohibidas a funcionarios, tráfico de influencias, revelación de secretos y falsedad en documento público, y ha mantenido que todas las actuaciones se enmarcan dentro de sus cometidos en la Comandancia, ya que lleva, entre otros apartados, las relaciones externas, y recalcó que todo se hizo con conocimiento de sus mandos. La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUG) está a la espera de conocer el resultado de las declaraciones para decidir si se persona en la causa como acusación.

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