Fomento inicia el arreglo de la A-62
El Ministerio acometerá desde el lunes obras de asfaltado para reparar el desteriorado estado de 76 kilómetros entre Tordesillas y Salamanca repleto de baches y socavones
Imagen donde se aprecia el mal estado del firme de la A-62, a la altura del kilómetro 177, hacia Salamanca.-J.M. LOSTAU
Más cerca de un trayecto tranquilo entre Valladolid y Salamanca; de un viaje por autovía sin padecer socavones, baches y un asfalto desconchado. Sin piedras amenazando la resistencia de las lunas de los vehículos.
El Ministerio de Fomento inicia el arreglo del tramo de la A-62 que discurre entre la localidad vallisoletana de Tordesillas y Salamanca por su deteriorado estado.
Las obras de asfaltado comienzan este lunes para reparar 76 kilómetros en lo que el propio ministro, Íñigo de la Serna, califica de unos trabajos «urgentes», después de que este diario denunciara con imágenes sus lamentables condiciones.
Las obras tendrán un coste de 4,15 millones, que procederán del crédito extraordinario habilitado por el Ministerio. Una partida que De la Serna anunció el pasado 22 de marzo durante su visita a un pequeño tramo de la Autovía del Duero a su paso por Soria.
En su comparecencia ante los medios, el ministro calificó de «emergencia» el tramo y cifró en 18 millones de euros la cuantía necesaria para rehabilitar esta vía de alta capacidad.
Fomento achaca a «las adversas condiciones meteorológicas de la campaña invernal y los continuos temporales de lluvia y nieve» que su deterioro se haya acelerado en los últimos meses.
Los trabajos se extenderán desde el punto kilométrico 156 de la autovía, una vez pasado el río Duero, hasta el 231+700, pasado el enlace de acceso a Castellanos de Moriscos, que comprende aproximadamente 76 kilómetros dentro de tres provincias: Salamanca, Zamora y Valladolid.
El programa de trabajo previsto incluye «el saneo de las zonas de firme con degradaciones profundas» y, también, «la reparación superficial mediante el extendido de una capa delgada de microaglomerado en todo el ancho del pavimento» para mejorar la rodadura y evitar la proyección de gravillas, según anunció el Ministerio de Fomento ayer a través de una nota.
Hasta ahora, el departamento de Íñigo de la Serna se había limitado a colocar señales que alertaban del peligro de un trazado que despertó las críticas de conductores y transportistas.
La señalización vertical y los paneles informativos de ‘reducción de velocidad’, ‘firme en mal estado’ y ‘peligro’, alertando de que saltan piedras, sólo constatan el mal estado de esta carretera de titularidad estatal, pero no impiden que transitar por ella resulte molesto y peligroso para los usuarios.
A Tordesillas y la capital salmantina les separa un trayecto, el de la A-62/E-80, por el que circulan miles de conductores, más de 12.000 a diario, según los datos del propio Ministerio de Fomento, que reflejan que el 30% de ellos son camiones. Vehículos pesados que son los que más dañan el asfalto.
Ahora resta esperar que actúe también para reparar el deficiente estado de la autovía entre Benavente y León.
Las propias Cortes autonómicas exigieron en el último pleno al Ministerio que acelere el arreglo de esta vía que también presenta baches y socavones.