Diario de Valladolid

La feria que busca su público más selecto

El trabajo de 36 talleres artesanos de toda España se mostrará al público en la plaza de Zorrilla hasta el próximo 1 de abril

Uno de los talleres que se podrán ver en la Feria de Artesanía hasta el próximo 1 de abril .-J.M. LOSTAU

Uno de los talleres que se podrán ver en la Feria de Artesanía hasta el próximo 1 de abril .-J.M. LOSTAU

Publicado por
Miguel Ángel Ruipérez

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La XXVI Feria de Artesanía de Valladolid abre sus puertas en la plaza de Zorrilla para mostrar, hasta el próximo 1 de abril, las creaciones de 36 talleres artesanos de toda España.

La feria persigue reivindicar la labor de los artesanos y los productos naturales en un intento por encontrar y «buscar un público», más selecto y exclusivo, que todavía hoy en día aprecia y valora este tipo de productos.

Hasta 36 stands podrán ser visitados estos días sobre la acera de Recoletos; cerámica, juguetes, madera, vidrio, piel, joyas, creaciones textiles o cerámica son sólo algunos de los materiales y productos que los asistentes podrán disfrutar y comprar, manteniendo siempre la calidad de la que ha presumido la feria desde sus inicios.

María Gómez Forte, de Encuadernación Forte (Valladolid), tiene «dos actividades» y se autodefine como «artesana encuadernadora y escritora de libros infantiles y autoeditora». Quiere reinvindicar la profesión e insiste en que no hace «papelería». A la encuadernación se dedica «desde hace cuatro años» y a escribir «toda la vida».

Gómez Forte defiende la encuadernación artesana, un oficio que cuenta con «15 siglos de antigüedad». Algunas de sus encuadernaciones están basadas en la «costura copta», inventada por los coptos, primeros egipcios cristianos. y se caracteriza por la «durabilidad» en el tiempo, garantizada por la «costura en cadena» y por el «hilo de lino».

La crisis del papel también ha llegado a su profesión, aunque en menor medida: «Dentro de lo que es el mundo de la edición, la parte que pertenece a los niños es una de las que menos han sufrido». «A los hijos y a los padres nos sigue gustando comprar libros», apunta. No obstante, aboga por «abrazar» las nuevas tecnologías, la digilitación y los «soportes» que se ponen a disposición de la sociedad. No niega la crisis del papel, pero considera que «todo es compatible».

Sobre su objetivo, y el de todos los mostradores presentes en la Fería de Artesanía de la ciudad, afirma que «existe un público que hay que buscar y encontrar», un público al que le gusta el papel». Los cuadernos de los encuadernadores artesanales son «cuadernos de capricho» con un precio que, la gente que lo valora, está «dispuesta a pagar». Ese público mantiene «este oficio y el papel», sentencia.

Creaciones PIMFA trabaja artesanalmente la madera de olivo desde hace más de 25 años. Faustino Jiménez es la cara visible de la empresa en la feria de este año. Es de Cascante, un pueblo 4.000 habitantes de Navarra. Lleva 47 años en el oficio y 25 acudiendo a la feria de Valladolid. Es un fijo. Entre la «amplia gama de productos de calidad» que ofertan se incluyen utensilios empleados en la cocina, en la decoración de casas rurales, en restaurantes o en paradores. Faustino defiende la «funcionalidad de todo el catálogo.».

Por su experiencia en otros años afirma que suele haber «mucha expectación» y que, si el tiempo acompaña, «la gente de Valladolid responde muy bien a este tipo de eventos», apesar de las «estrecheces económicas» de muchas familias, concluye.

Hace 7 años vinieron por primera vez a la Feria de Artesanía de Valladolid y desde entonces no han faltado. Jabón Zorro d’Avi es una marca de cosmética natural de Puebla de Sanabria, en Zamora, pero que cuenta con numerosos puntos de venta en toda la península. La empresa comenzó hace 25 años y tuvo como «ingredientes esenciales» la naturaleza y la tradición. Se mantiene como una empresa familiar en la que poco a poco se han involucrado la totalidad de sus miembros. Se muestran «muy satisfechos» con la acogida que, año tras año, tiene la marca en la ciudad y con la respuesta de la gente ante un producto «artesano y de calidad» que se ha sabido ubicar en un mercado tan masificado.

Los puestos de la XXVI Feria de Artesanía de Valladolid levantan la persiana hasta el próximo 1 de abril para mostrar la labor de unos profesionales que, año tras año, demuestran sus dotes y cualidades en un mercado que todavía hoy en día se sigue valorando y apreciando.

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