Diario de Valladolid

Gourlay dirige a la OSCyL con el estreno de una obra de Torsten Rasch

El director titular de la orquesta vuelve esta semana con un programa que se completa con Dvorák y Edwar Elgar

Andrew Gourlay dirige la OSCyL-@OSCyL

Andrew Gourlay dirige la OSCyL-@OSCyL

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ICAL

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La Sala Sinfónica del Centro Cultural Miguel Delibes acogerá mañana, jueves, y el viernes, a las 20 horas, el concierto de abono número once de la actual temporada de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, bajo la batuta de su director titular, Andrew Gourlay. El precio de la entrada oscila entre los 12 y los 35 euros.

El concierto dará comienzo con ‘La Serenata para vientos op. 44’, de Antonín Leopold Dvo?ák (1841-1904). Se trata de una de las obras más frescas e inspiradas del maestro checo. Fue terminada en apenas 14 días, en enero de 1878, y estrenada en noviembre de ese mismo año en un concierto de la Orquesta de Praga, con el compositor a la batuta. Fue su primer concierto con obras propias y tuvo una gran acogida.

La primera parte del concierto tendrá un broche de oro con el estreno mundial de ‘…In Umbra…’ (2017), un encargo de la OSCyL a Torsten Rasch. Este pretigioso compositor alemán nació en 1965 y empezó a recibir lecciones de piano a los seis años. En 1990, tras la caída del muro de Berlín, emigró a Japón y se convirtió en compositor de música para el cine y la televisión, escribiendo hasta el momento más de cuarenta bandas sonoras. En 2002 volvió a Alemania y desde entonces ha compuesto música orquestal, de cámara y óperas por encargo de instituciones como la BBC, la Filarmónica de Londres, la Orquesta de la Gewandhaus, la Ópera Nacional Inglesa o la Ópera Estatal de Baviera.

‘…In umbra…’ dura unos diecisiete minutos y, según palabras del propio Rasch, se basa en el coral luterano ‘Aus tiefer Not schrei ich zu dir’, también conocido como ‘De Profundis’. Sobre su estilo compositivo, asegura que responde a una gran variedad de estilos musicales del pasado y del presente, afirmando que su música es extremadamente expresiva y extremadamente organizada, además de un examen continuo del equilibrio entre el lado intelectual y el emocional de la expresión.

La segunda parte del concierto será para la ‘Sinfonía nº1 en la bemol mayor op.55’, de Edward Elgar (1857-1934), el compositor inglés que ha obtenido mayor reconocimiento internacional. La Sinfonía fue compuesta entre el verano de 1907 y el otoño de 1908. Se estrenó el 3 de diciembre de 1908, en el Free Trade Hall de Manchester, dirigida por Hans Richter, a quien estaba dedicada. La sinfonía fue muy bien recibida en su estreno y se interpretó más de cien veces el primer año, conservándose en el repertorio hasta nuestros días. 

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