Diario de Valladolid

Piden que Hyeiba venga a España para que decida «sin miedo» dónde vivir

La hermana teme que niegue estar retenida en Tinduf por sentirse «acorralada» y la Asociación ‘La libertad es su derecho’ dice que allí no puede elegir con libertad / El Ministerio acude a la diplomacia

La joven Hyeiba, en los campamentos de Tinduf, en una foto de hace tres semanas cedida por su hermana.-Foto cedida por su hermana

La joven Hyeiba, en los campamentos de Tinduf, en una foto de hace tres semanas cedida por su hermana.-Foto cedida por su hermana

Publicado por
Alicia Calvo
Valladolid

Creado:

Actualizado:

Que le permitan volver a España y decida aquí, «con libertad y sin miedo», dónde desea vivir. Esto es lo que exige la joven Juel, que denunció que su hermana Hyeiba, de nacionalidad española y 22 años, permanece retenida desde hace tres en los campamentos de Tinduf porque su madre biológica le retiró su documentación, en lo que iba a ser una visita de unos días a su familia en el Sáhara.

También lo solicita la asociación ‘La Libertad es su derecho’, que asesora a la denunciante y agrupa a medio centenar de familias españolas de mujeres de origen saharaui retenidas contra su voluntad por sus familias en esos campamentos.

«No pueden preguntarle allí en Argelia qué quiere hacer porque no es libre para decir la verdad. Lleva retenida mucho tiempo y tiene la presión de su familia biológica que está con ella», indica la portavoz del colectivo, Elisa Pavón, sobre la joven Hyeiba que residía en el municipio vallisoletano de Laguna de Duero con la misma familia de acogida que cuidaba de su hermana.

El Ministerio de Exteriores recibió la denuncia de Juel y ya ha iniciado las acciones diplomáticas encaminadas a esclarecer el caso de Hyeiba.

La Oficina de Información Diplomática del Ministerio confirmó ayer a este diario que «ya se han puesto en marcha y se están haciendo todas las gestiones para conocer cómo es realmente la situación».

El Gobierno guarda un cauteloso silencio sobre los detalles porque se trata de «negociaciones muy delicadas que deben llevarse con absoluta discreción si se quiere que lleguen a buen término», pero sí explica, a través de esta oficina, que «lo primero es determinar cuál es la situación real y cuáles son las circunstancias que rodean su estancia allí», y señala que «hay que tener en cuenta que se trata de una persona mayor de edad».

Juel confirma que la cónsul española ya ha tenido un primer contacto con Hyeiba en Tinduf, pero lamenta que su hermana se sienta «acorralada, bajo presión y su influencia».

Por esta razón teme que ofrezca otra versión y sostenga que todo es un engaño «por miedo y porque está allí con ellos». Se refiere a la madre biológica y al hermano de ambas, que son los que le habrían retirado el pasaporte y la vigilarían constantemente.

Para refutar esta posible posición, la hermana mayor de Hyeiba se aferra a todos los WhatsApp desesperados que recibió de ésta y que adjuntó a la denuncia que presentó el pasado 25 de septiembre. En el último mensaje, publicado por este diario, pedía auxilio para regresar: «Me quitaron los papeles y hasta este momento no sé nada de ellos y tampoco he encontrado la forma de irme a España. [...] Necesito ir a seguir con mi vida y mi familia».

Juel defiende que su caso es diferente al de las otras cuatro españolas retenidas en similares circunstancias por el parentesco de quien denuncia. «Soy su hermana biológica y me enfrento a mi propia familia por ayudarle a conseguir su libertad. Sólo busco eso, que haga lo que quiera, pero lo que de verdad quiera; que tenga oportunidades y que pueda escoger».

Se muestra convencida de que si Hyeiba se encontrara en España «se quedaría». Si no, si todo el proceso se dirime en el Sáhara, ve un final más oscuro. «Está deseando seguir con su vida aquí, pero con la denuncia se encuentra en una posición muy difícil. Ella está allí y podría sufrir acoso por parte de mi hermano y de mi madre. Está sometida a los dos», expone.

Desde ‘La Libertad es su derecho’ insisten en que aunque Hyeiba tenga 22 años «al ser española está sujeta a protección consular por derecho» y exigen su repatriación «por razones humanitarias».

Elisa Pavón explica que llevan tiempo negociando, «tratando de que trasladasen a Hyeiba a la Embajada de España en Argel o al aeropuerto de Tinduf», pero explica que «el Frente Polisario lo denegó».

En vista de los nulos resultados, en un punto en el que todas las vías de diálogo emprendidas por la hermana y por el colectivo resultaron infructuosas, y cuando ya se ha llegado a la denuncia, piden al Ministerio «que traiga a Hyeiba a España» y sea aquí donde se le tome declaración para comprobar en qué lugar quiere residir. «Ninguna familia reclama que las jóvenes vengan con ellos, ni la de Hyeiba tampoco, pero sí que pueda elegir, que sea dueña de su vida porque ahora está retenida e indocumentada».

Sostiene que el que se exprese en el país al que su madre biológica y su hermano «le impiden volver» resulta clave para evitar coacciones y represalias. «Después de todo lo que está pasando, Hyeiba necesita un tiempo de reposo y no estar rodeada de quienes la retienen, que tenga la libertad para decir si quiere vivir en España, en los campamentos o donde le apetezca», indica Pavón.

Para la portavoz del colectivo de familias de mujeres afectadas por esta situación, la implicación del Ministerio supone «un paso muy importante».

tracking