Manolo Chinato: «La ciudad me deprime y el campo me saca la sonrisa todos los días»

Manuel Muñoz Sánchez, Manolillo Chinato, nació en el 52 en Puerto de Béjar (Salamanca). Fue vaquero, carnicero y poeta, todo al mismo tiempo. Saltó a la fama porque apareció desnudo, a lomos de su caballo, en la carátula del disco ‘Extrechinato y tú. Poesía Básica’. El disco fue un éxito de ventas, aunque la relación con Extremoduro empezó mucho antes. En el 89 conoce al grupo en Hervás, donde se fragua su primera aparición sobre el escenario, recitando ‘Ama, ama y ama’, hoy traducido a varios idiomas. Su segundo libro de poemas se titula ‘Poeta no quise ser’.

Pregunta . ¿A qué se debe tanta rebeldía?

Respuesta .- A que hay mucha injusticia.

P .- ¿Cómo se llama su yegua?

R .- Mi yegua favorita se llamaba Gitana. La que tengo ahora se llama Torera y su hijo, un potro que ya es caballo, Viento.

P .- Su último libro de poemas se titula ‘Poeta no quise ser’. ¿Por qué?

R .- No es solo el título del libro, nunca quise ser poeta, esa es la verdad. Empecé circunstancialmente. Quería escribir lo que sentía por una mujer y lo que sentía también cuando me mandaba a tomar vientos.

P .- Y el primero, ‘Amor, rebeldía, libertad y sangre’. Un poco incendiario, ¿no?

R .- Eran tiempos para ello, tanto por mi edad como por mi temperamento.

P .- ¿Por qué empezó a escribir?

R .- Por amor y luego por desamor. Me di cuenta de que era capaz de expresar mis sentimientos así.

P. - Estuvo en el Colegio de Armenteros. ¿Allí ya escribía poemas?

R .- No escribía, pero me gustaban los que leía en los libros de texto. Aunque nunca encontré a mis favoritos, Miguel Hernández o Lorca.

P .- ¿Nunca quiso convertirse en un abogado rico y vivir en la ciudad?

R .- La ciudad me deprime y el campo me saca la sonrisa todos los días.

P. - ¿Qué supuso actuar con Extremoduro y cantar con ellos sus propias letras?

R .- Fue en Hervás. Me pidieron que subiera al escenario y recitara ‘Ama, ama y ama’. Fue increíble el subidón de fuerza y rebeldía. Desde entonces, muchos conocen mi poesía.

P .- ¿Me puede recitar algo ese famoso poema?

R .- “Quisiera que mi voz fuera tan fuerte que a veces retumbaran las montañas y escucharais las mentes social-adormecidas las palabras de amor de mi garganta (…). Hay que dejar el camino social alquitranado porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas. Hay que volar libre al sol y al viento repartiendo el amor que tengas dentro (…). ¡Ama, ama y ama y ensancha el alma!”.

P .- ¿Qué siente cuando corean sus versos miles de personas?

R .- Se me pone la carne de gallina y se me escapan las lágrimas.

P. - En los últimos años ha compatibilizado la ganadería con el bar y los versos…

R .- Sí, también con la carnicería porque ahí empecé con mi padre. Con la ganadería he estado hasta hace año y medio.

P .- ¿Filósofo o poeta rural?

R .- ¡Eso es mucho para mí! Más que poeta rural, soy poeta del mundo.

P .- ¿En qué cree?

R .- Creo en mí; si no, lo tengo jodido. Si hago las cosas bien, me alegro, y si las hago mal, me mosqueo.

P .- ¿Qué le parece el mundo en el que vive?

R .- Una puta mierda.

P .- ¿Por qué?

R .- Porque estamos deteriorando la tierra y sus habitantes. Impera la ley del dinero y no nos damos cuenta de que las cosas hay que buscarlas en el interior de cada uno.

P .- ¿Su fuente de inspiración?

R .- La tierra, los árboles, los pájaros y la gente buena.

P .- ¿Cómo define su poesía?

R .- Sincera y diferente.

P .- ¿Para quién escribe?

R .- Para mí.

P .- ¿Cómo es un día normal de Chinato?

R .- Me levanto sobre las 9, 30. Desayuno y me voy a una casita pequeña que me he hecho, alejada de los hombres. Allí, en mi campo salvaje, no tengo dueño. Por la tarde regreso, aunque a veces no. Más o menos hago lo que me apetece.

P. - ¿Es verdad que tiene un miliario de la Vía de la Plata en una finca de su familia?

R .- Ahí sigue, a disposición de quien quiera verlo y admirarlo.

P .- ¿Le caen bien los turistas?

R .- Hay de todo. Algunos vienen buscando cosas auténticas y otros piensan que están por encima de nosotros.

P .- ¿Cuánto cuesta una birra en Chinato’s Bar?

R .- 1,10 euros.

P .- Aunque ya está jubilado, ¿se le puede encontrar por allí?

R .- Voy bastante menos, pero mi presencia en el bar es importante. Mucha gente viene a verme, a comprar un libro o una camiseta.

P .- ¿Va mucho la gente de Extremoduro a su bar?

R .- Fito menos, pero Iñaki, bastante. Los de Marea, también. En ese sentido tengo muchos amigos.

P .- ¿Qué verso tiene para la mujer que ama?

R .- Cualquier poema del primer libro. Del segundo hay uno que dice:

“Yo sé que no soy el más guapo ni el que más dinero tiene, pero no te olvides nunca que soy el que más te quiere”.

P .- ¿Y para su madre?

R .- Del primer libro, ese que dice: “No llores madre en el cielo porque a ese cielo tu hijo no vaya, que mi cielo estuvo aquí cuando tú estabas en casa”.