El PP insiste en que la gestión pública del agua «saldrá más cara»

El Grupo Popular del Consistorio de Valladolid aseguró ayer en un comunicado que las declaraciones del concejal de Hacienda, Antonio Gato, a EL MUNDO asegurando que el presupuesto municipal de 2017 disminuirá entre 3,5 y 4 millones supone «una confesión, en toda regla, de los perjuicios de la nueva gestión del tripartito al frente del Ayuntamiento».

Gato se refería a una caída de las cuentas en la misma cuantía que el canon del agua, que Valladolid dejaré de recibir parcialmente el próximo año.

Para el PP esta disminución supone «que se harán menos cosas en 2017 de las que se están haciendo este año». Según el grupo que preside José AntonioMartínez Bermejo, las declaraciones del edil responsable de las cuentas municipales «no hacen sino confirmar que el cambio en la forma de gestionar el ciclo del agua se va a traducir en menos ingresos y por lo tanto va a costar más a los vallisoletanos». Según el PP, Gato anuncia recortes en el gasto «que no van a depender de él, sino del precio político que impongan los socios de gobierno del señor Puente», en referencia a Valladolid Toma la Palabra que, a diferencia del PSOE, defendió el cambio de gestión del agua, de privada a pública.

Para el grupo que encabeza Martínez Bermejo, «la precaria situación política del sr. Puente, cuyo bastón de mando depende de la extrema izquierda, ha impuesto ese cambio de gestión que puede provocar, además, otro tipo de respuestas típicas en los tripartitos como son las subidas de impuestos de los contribuyentes».