Puente propone anular el decreto de Franco, pero conservar la Laureada

La Laureada no será retirada del escudo del Ayuntamiento de Valladolid, pero se pedirá al Gobierno que anule el decreto por el que Franco la concedió al Consistorio para recompensar su papel en la Guerra Civil.

Esta será la propuesta con que el alcalde, Óscar Puente, intentará satisfacer en una próxima reunión a la plataforma por la retirada de nombres y símbolos franquistas de Valladolid –de la que forma parte el propio Partido Socialista– y evitar polémicas como las desatadas en otros ayuntamientos de izquierda, de cuya imagen quiere diferenciarse. Una postura que anunció en octubre del año pasado al considerar que no era «urgente» y reiteró en enero de este mismo año al considerar que no era «una prioridad para los ciudadanos».

«El problema no se encuentra en un símbolo que es una condecoración que se concede hace más de 200 años, sino en que Franco se apoderara de ella para fines ignominiosos. Por lo tanto, hay que pedir que ese decreto se anule en cuento se clarifique el nuevo Gobierno de España y que éste también arbitre cómo puede seguir la Laureada en el escudo», explica a DIARIO DE VALLADOLID-EL MUNDO el portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento, Pedro Herrero.

Éste está convencido de que «la gente no percibe la Laureada como un símbolo del franquismo» y señala que «cuando algunos lo comparan con la esvástica es para echarse las manos a la cabeza». El portavoz se refiere a una reunión convocada por la Plataforma y celebrada el pasado jueves, a la que acudió junto con los representantes de Valladolid Toma la Palabra y Valladolid Sí Se Puede.

Obvimente, en ella Herrero era la nota discordante y se le presionó con dos cuestiones: el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, el recuerdo de la postura que el grupo socialista tenía en la oposición, favorable a la retirada de la Laureada, tal como queda ratificado en las declaraciones recogidas por este periódico al entonces portavoz socialista, Javier Izquierdo, que en febrero de 2014 reclamaba su retirada. «Es uno de los símbolos más claros a retirar», dijo.

Herrero entiende que, entonces no, pero ahora sí la ley se cumple. Hace referencia a la sentencia de TSJ del 30 de octubre de 2015, que desestima el recurso de apelación promovido desde la Plataforma y presentado por el que fuera concejal de IU, Alfonso Sánchez, en un procedimiento abierto contra el Ayuntamiento de Javier León de la Riva. Una decisión del tribunal abocó al una serie de nombres de calles, pero al reclamar más, incluida la retirada de la Laureada, los magistrados responden «que han de estimarse cumplidos los pronunciamiento condenatorios» y el Consistorio no está obligado a más

Herrero también reconoce que, más allá de la ley, existe margen para la voluntad política. «Vamos poner una placa conmemorativa en el edificio de las cocheras. El alcalde, es su potestad, puede cambiar el nombre de calles más adelante, pero este Gobierno municipal no va a crear problemas donde no hay, aunque esté en desacuerdo a veces con los grupos de Valladolid Toma la Palabra y Sí se Puede».

La toma de postura del grupo socialista municipal viene de la intención de la Plataforma por la retirada de nombres y símbolos de una nueva ofensiva que incluye, al menos, tres elementos: una reunión en la Alcaldía, el registro de una petición para la retirada de la Laureada y de los nombres varias calles, así como un argumentario dirigido a los socialistas para poner de relieve las contradicciones de Puente.

Así lo anticipó a DIARIO DE VALLADOLID-EL MUNDO Julio del Olmo, presidente de la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica, integrante de la plataforma para la retirada de nombres y símbolos franquistas. Para él, Puente personifica el «doble discurso» del PSOE, de la oposición al poder, y cómo, una vez en él, «manifiesta un apego a estos signos al igual que el PP». «Es muy difícil de comprender que ahora se refugie en una apelación a una sentencia contra el Ayuntamiento de León de la Riva».

A favor de retirar la Laureada están los grupos de Valladolid Toma la Palabra y Sí se Puede. Por parte del primero, María Sánchez recuerda cómo la reciente retirada de la estatua de Onésimo se ha vivido «con completa normalidad».

Para la portavoz de Sí Se Puede, Charo Chávez, la retirada de símbolos y nombres franquistas «no puede ser más complicado ni anormal como fue prohibir fumar en los lugares públicos». En este caso, desprenderse de un mal hábito que viene «del modelo del 78», aseguró.