Diario de Valladolid

Cultura

«Los hombres se ríen más de sí mismos que las mujeres»

Entrevista al actor Nancho Novo. Aunque estudió Medicina, el fuerte de Nancho Novo es la interpretación. Hoy presenta en Valladolid ‘El Cavernícola’, una obra con la que ya lleva más de nueve años, 1.500 representaciones y con la que ha repartido risas por todo el país.

Nancho Novo.-El Mundo

Nancho Novo.-El Mundo

Publicado por
M. Díez Garrido

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Nancho Novo presenta  El Cavernícola hoy a las 20.30 horas y a las 22.30 y mañana a las 19.30 en el Teatro Zorrilla. La obra promete hacer reír al público con un monólogo del conocido actor a partir de las diferencias que existen entre los hombres y las mujeres desde que estos habitaban en cuevas hasta ahora.

Pregunta.-  El espectáculo empieza criticando a los hombres, ¿en qué se basa?

Respuesta.-  No es crítica como tal, sino que hace mucha caricatura. El espectáculo desmonta el mito del cavernícola, haciéndonos ver que no era para nada un ser bruto y primario, con el garrote, sino preocupado por su mujer y con mucha sensibilidad. Está demostrado por los hallazgos que veneraban a las mujeres. A partir de eso trato de explicar por qué los hombres tenemos comportamientos que molestan tanto a las mujeres y al revés.

P.- ¿Cuál es la diferencia entre el hombre de las cavernas y el hombre actual?

R.- Varía el envoltorio. Lo que dice el show es que realmente no hemos variado en nada. Seguimos comportándonos de la misma manera, pero con distintos elementos. Ahora no matamos mamuts y tenemos aparatos tecnológicos.

P.- Los estereotipos colocan a los hombres como seres más cavernícolas que las mujeres ¿es algo que nota en la reacción del público?

R.- No. Después de 1.500 caricaturas, he podido comprobar que el porcentaje es de 65% mujeres y 45% hombres. Además, son ellas las que primero se ponen de pie a aplaudir. También es que les pego más cera a los hombres porque nos lo merecemos.

P.- ¿Resulta arriesgado hablar de la lucha de sexos sobre el escenario?

R.- Resultaría arriesgado si hiciera guerra, pero lo que hago es un armisticio, trato de llegar a una conciliación entre ambos géneros. Para mí es una satisfacción ver que ellas se vuelcan y se quedan al final de la obra para felicitarme.

P.- En estos años en los que ha interpretado El Cavernícola , ¿ha cambiado de alguna forma la relación entre hombres y mujeres?

R.- Nada. Si no ha cambiado en doscientos siglos, no va a cambiar ahora. Pero sí ha cambiado mi relación personal con las mujeres gracias a este espectáculo. Es ahora mil veces mejor. Básicamente lo que he aprendido es que las mujeres demandan más atención, que nos fijemos en los pequeños detalles que ellas valoran tanto y nosotros pasamos por alto.

P.- ¿Fue complicado adaptar el texto norteamericano al actual?

R.- Sí, mucho porque la cultura es totalmente diferente. Los americanos están más chapados a la antigua en cuanto a los roles de la pareja.

P.- ¿Cómo ha cambiado el texto en estos años?

R.- Tiene la misma estructura y el mismo esqueleto pero ha ido evolucionando. Al principio escuché muchas críticas de mujeres y hubo tres o cuatro que me las tomé muy en serio y lo tuve en cuenta. Por ejemplo, en el americano habla del momento en el que el hombre se da cuetna de que tiene que lavar en casa, pero eso es antiguo e insultante.Yo curro en mi casa mucho, mogollón. Cada uno tiene su parcela y doy por hecho que el resto es igual, pero a lo mejor no.

P.- Los monólogos y espectáculos humorísticos son cada vez más frecuentes a pesar de la crisis. ¿Qué representa el humor en estos tiempos?

R.- A pesar de la crisis no. Es que la crisis potencia que haya más monólogos porque es más fácil mantener una compañía con una persona que con un elenco grande de actores. No es lo mismo llevar cuatro elementos escenográficos a llevar una casa entera. En mi caso, ha sido una casualidad, porque soy un actor que hago de todo y a raíz de El Club de la Comedia decidieron los americanos que yo era el idóneo para adaptarlo, después lo dejé y volví coproduciendo, pensando que iba a hacer un añito, ¡y ya llevo siete!

P.- ¿Y piensa continuar con este show muchos años?

R.- Me he dado cuenta de que merece la pena mantener este espectáculo encima del escenario porque gusta mucho y sería una ‘putada’ retirarlo.

P.- ¿Qué otros proyectos tiene?

R.- Estoy rodando una serie en Telecinco y he participado en un par de películas. No me aburre este espectáculo, me lo paso como un enano, pero también necesito hacer más cosas. Lo que estoy grabando es un drama ‘del copón’.

P.- Será muy diferente.

R.- Sí, me paso las horas de rodaje sufriendo. Llego a casa y me cuesta quitarme máscara. A veces llego y me pongo a llorar con las noticias. ¡Que son para llorar!

P.- ¿Somos cada vez más cavernícolas?

R.- Ya quisiéramos. El cavernícola era un tipo sensible y coherente, que es lo que deberíamos aprender. Deberíamos serlo también para volver a tener contacto con la naturaleza, porque es muy triste que para que tu hijo tenga que ver una vaca tengas que buscarlo en Internet.

P.- ¿Qué enseñanza nos deja la obra?

R.- Enseña a observar y a comprender a tu pareja. Si nos escuchamos y entendemos los comportamientos que nos resultan ‘marcianos’ e irritantes, podemos llegar a disfrutar de ellos y ser partícipes.

P- ¿Y qué tienen que aprender las mujeres de los hombres?

R.- Me saldrán cien mil comentarios en Twitter en contra, pero yo percibo que las mujeres deberían estimular su sentido de autocrítica. Los hombres tienen más facilidad para reírse de sí mismos que las mujeres, o esa es mi apreciación.

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