Madrid, la fórmula de la coalición electoral PP-Cs
YA ANUNCIAMOS hace cosa de un par de semanas que la ilusión que se ha instalado en Ciudadanos para no desaparecer como marca y como seres a un sillón pegados era la tesis del coalicionismo. Es decir, una fusión con el PP en el venidero adelanto electoral. Si había dudas sobre tal adelanto, el gafe del gobierno las disipó ayer. Y en el PSOE saltaron todas las alarmas cuando el que acierta todo lo que no va a pasar anunció que no va a haber adelanto electoral. Las carreras en sede socialista eran tipo Usain Bolt. Fue saltar el teletipo con con augurio del pregonero y salió un grito del seno socialista como un resorte: «Hay elecciones en primavera». Lo de la coalición está más difícil. Porque esa era una opción viable cuando Cs era electoralmente viable. Por muy mal avenidos que estén el gobierno de la Junta, en el que cada uno iba a lo suyo, pero es que ahora cada uno va a lo de cada cual. Ayer tocó promoción en Madrid para decir que la Delta Plus ya llegó a Castilla y León. Ahora nos vamos a Madrid a contar lo que vamos a hacer en Castilla y León después de dos años destrozando la sanidad a golpe de soberbia y arrogancia. Muy didáctico todo. Pero la mejor y sus anuncios que no se cumplirán jamás quedó ensombrecida, una vez más, por la tormenta de verano, que acabará en primavera, sobre el adelanto electoral. Jamás vimos serpiente de verano, que es el dicho, tan larga. A nadie interesa ya lo que predique la mejor, una vez arruinado el crédito con el que presuntamente llegó a la política autonómica, porque por la nacional ya había pasado de la mano del socialismo, el socialismo de Felipe González. Hará historia. Como el detonante del primer adelanto electoral de la historia de Castilla y León. Pregunten en Génova cómo hicieron la coalición electoral con sus socios en las últimas urnas. No quiero dar mas pistas. Anticipación. Periodismo.