Diario de Valladolid

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SE TRATA de mentir. De mentirnos. A veces para alejar los miedos, en otras ocasiones para alimentar ambiciones sin que la conciencia, interventora ética incansable, ponga reparo alguno. El lenguaje, escrito, verbal o mental, ejerce como cooperador necesario. Y la semántica, con su pasamontañas tejido con los más excelsos hilos de la ignorancia y la desidia, cuando no de la manipulación, es el cómplice perfecto.

Disculpen esta aparición en el ruedo poligonal de la opinión, a portagayola, quizá debido a la lectura, en sus primeras páginas, de La ilusión de la felicidad, de Carl Cedeström, salpimentada con algunos pasajes de ‘Rompe el ídolo’, de Anthony de Mello. Y algún artículo suelto, y capítulos variopintos, de Fernando Savater, al que tampoco mentirse le resulta un camino ya no lúcido, sino cómodo. Y eso que se hubiera ahorrado la amenaza, siempre mortal (con o sin disparo) del nacionalismo.

El caso es que ayer terminaron los sanfermines. A cuyas fiestas con toros llaman encierros, aunque sólo el rito en el que los toros proceden del campo, de la libertad, merece ser llamado así.

Pregúntele al preso cuándo perdió su libertad. Pues en comisaría (calle), no en la prisión (plaza). Al bóvido de lidia se le encierra cuando se le conduce desde su naturaleza originaria. No cuando ya sale encerrado entre edificios de seis alturas, seis. Llamar encierros a los de Pamplona es conformarse a jugar al fútbol sin balón. Engañarse.

Castilla y León, con Cuéllar como ejemplo de historia y fidelidad al rito, ofrece el encierro con el toro en libertad, al que se traslada, con el mando de la montura y el auxilio de los bueyes, desde el campo hasta la plaza. Por eso se le encierra, por mucho que esta palabra se aplique a las carreras con astados por las calles.

Cuéllar es la celebración, Pamplona la competición. Libertad frente a velocidad, rito frente al reloj. Una costumbre que sublima la vida y la comunión con la naturaleza. Por mucho que obliguemos a las palabras a mentir. Bajo la tortura impasible de la mercadotecnia.

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