Decidida apuesta que salva el trabajo y da futuro a Ávila
MILLONES PARA RESTACAR la planta de Nissan en Ávila y, con ella, el futuro de una tierra, Castilla y León, que no soporta ya más cierres de de empresa. Una decidida apuesta en la surge como principal valedor el ejecutivo de Juan Vicente Herrera, que es quien más aporta al futuro de una industria que, a lo largo de los años, se ha demostrado vital y sobre la que pesaba la espada de Damocles del cierre.
«De todos va a depender que este acto de presentación de este plan sea un éxito colectivo», aseguraba en su intervención el presidente de la Junta. Una afirmación que es tanto como decir que lo presentado no quede en agua de borrajas.
En ese discurso, Herrera expresa el «compromiso» de la Administración autonómica con el proyecto, que concreta con la aportación económica más importante de todas las partes, incluso por encima del dinero que invertirá la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi.
De esta manera, la Junta de Castilla y León es la que más contribuye económicamente a la salvación de esta factoría que hace más de un año veía con «gravísima preocupación» la posibilidad de su desaparición después de seis décadas involucrada de forma decisiva en la capital abulense, tal y como comentó Herrera, que llegó incluso a decir que estaba «abocada a la incertidumbre, cuando no a un cierre».
Ahora, un año después el proceso de transformación hará que esta apuesta se convierta en «un éxito colectivo», del que tienen que ser partícipes todas las partes, desde los trabajadores a la industria, pasando por las administraciones central y autonómica. Más allá de los agradecimientos y reconocimientos a todos aquellos que haan puesto de su parte para que Nissan continúe siendo una realidad en Ávila y en Castilla y León, resulta obligado que desde la Administración autonómica se vigile que se cumple con todo lo pactado y firmado. Es su obligación, siempre debe hacerlo, pero mucho más ahora que ya se sabe es quien más dinero aporta en esta tarea.
Un paso al frente de todas las partes implicadas que surge frente al «miedo» a un futuro negro, y que debe ser valorado porque de él es surge este nuevo proyecto industrial, empleando un «método» que a Castilla y León le ha dado «muy buenos resultados», pensando en «el empleo actual y futuro, así como en los trabajadores».
Ese es el reto a partir de ahora. Lo peor puede ser que haya pasado, si se tiene en cuenta que no hace tanto se hablaba a las claras del fin de la actividad de Nissan en Ávila. Pero lo que resta, el camino que se debe andar a partir de ahora, no dejará de tener dificultades. Esas son las que deberán solventarse y sobre las que desde las administraciones, sobre todo la Junta, se tendrá que estar vigilante para que esta decidida apuesta salve el trabajo y dé futuro a Ávila.