El mañana del campeón

El año 1998 marcó un antes y un después en la historia del VRAC. El triunfo en la Copa del Rey de ese año significó la llegada del club a la cima. Se pasó del objetivo de lograr la permanencia al de luchar entre los grandes por los títulos nacionales. 20 años después muchos de los que militaban en las categorías inferiores, y que recuerdan ese día glorioso, son la base del Quesos que ha conquistado en Valencia su quinta copa. Este es el reflejo de la filosofía del actual campeón de Liga. Pasar de los Miguelón, Frechilla, Calle, Baeza a los hermanos Blanco, Álvaro Ferrández, Pablo Gil, etc.

El proyecto de cantera para niños y niñas está orientado a quieran practicar rugby y educarse en los valores que transmite este deporte, y en los valores de este club que resume su lema:‘Fuerza y Honor’.

Aunque lo de menos son los resultados es cierto que mirando los datos se demuestra que la cantera azulona ya apunta maneras. En la Liga de Castilla y León, hace una semana, pusieron un gran colofón a la temporada.

Los alevines (sub-14), se alzaron con el primer puesto en la Liga y lo hicieron a lo grande, sin encajar ni una sola derrota.

Los benjamines (sub-12), compitieron hasta el final con los vecinos del Salvador, manteniendo durante toda la temporada una dura pugna en varios partidos que se resolvieron por la mínima en uno u otro sentido, o incluso con encuentros empatados. Finalmente, el campeonato cayó del lado chamizo. Mientras que los prebenjamines (sub-10) ganaron todos sus partidos de la jornada, completando de esta manera un año excepcional, donde no han conocido la derrota en las diez jornadas disputadas.

Los más pequeños, los linces (sub-6), lo pasaron en grande y ya comienzan a asomar las habilidades que les inculcan sus entrenadores y que a buen seguro constituirán el cimiento de los siguientes años de rugby.

Los jabatos (sub-8) continúan el camino iniciado en linces, conociendo ya los primeros secretos del rugby y siendo la categoría fundamental dentro del organigrama del club. Son chavales de siete años con los únicos objetivos de divertirse y aprender. Continúa reforzándose la enseñanza de los valores inherentes al rugby, al igual que en las categorías venideras. De esta manera, exhibieron durante todo el año un poderío incontestable para el resto de conjuntos, imponiéndose en todas las concentraciones regionales.

«Nuestros canteranos, cada vez más formados técnicamente y con los valores del VRAC ya inculcados, poco a poco van haciéndose mayores. Su continua progresión y educación se enfoca para que el día de mañana sean buenos jugadores del club y buenas personas, y se muestren orgullosos como uno de los valores principales de nuestro club, en cualquiera de sus equipos senior. Toda un proceso que, tras muchos años de trabajo y dedicación, espera conseguir una formación integral de cada miembro del VRAC», explica Mario Barandiaran, manager general del club.

El club no es ajeno a los nuevos tiempos y se ha apostado muy fuerte por la cantera femenina. Este año su equipo Regional ha finalizado en tercer lugar la liga y el objetivo de crecer cada temporada se cumple con creces. Además su jugadora Cristina López ha sido la primera quesera en recibir la llamada de una selección y ha estado en el Europeo de Seven Sub 18 que se disputó en Francia.

Las próximas semanas serán de preparación para los Campeonatos de España y los distintos Torneos nacionales será el momento de comprobar el nivel frente a clubes de resto de la península. Lo que está claro es que dentro de 20 años, estos linces y jabatos de hoy serán los campeones del futuro. Un testigo generacional más que asegurado.