Diario de Valladolid

EDITORIAL

Contratos de baja cualificación, los más demandados en Ecyl

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LA RADIOGRAFÍA que ofrece periódicamente el Observatorio de las Ocupaciones del Sepe (antiguo Inem) revela que los empleos de baja cualificación y de carácter temporal son los más demandados en Castilla y León. Camareros, peones en industrias manufactureras y personal de limpieza copan algo más de tres de cada diez nuevos contratos en los que intermedió el Ecyl.

En concreto, las tres actividades movieron 307.635 contrataciones durante el pasado año, casi el 35% de las 886.842 firmadas. Vendedores, peones agrarios, ayudantes de cocina, conductores y operadores de telemarketing y operadores de instalaciones les siguen e la lista de las profesiones más demandadas por los empresarios a través del Ecyl. Estas diez ocupaciones sumaron el año pasado 438.796 contratos en un año, cifra que supone el 50% del total. En cabeza figuran las altas laborales de camareros, con 145.000, seguidas de las 113.300 de peones de industrias y, a considerable distancia, de las 49.330 de profesionales de la limpieza.

Junto con el hecho de que se trata de ocupaciones que no requieren mucha cualificación, se observa que las altas laborales van asociadas a la temporalidad. El volumen de contrataciones llegó a aumentar un 8,4%, pero fueron de menor duración y más repartidas. De hecho, la tasa de rotación –número de contratos que firma cada persona– en 2016 fue en de 2,6 por persona, la más alta de los últimos seis años. En el caso de los peones de industrias manufactureras, la tasa de dispara hasta 4,4 contratos sellados y en el de los camareros a 3,4 de media.

El panorama que dibuja el Observatorio del Sepe para Castilla y León no difiere del nacional, donde encabezan el listado de ocupaciones más demandadas las mismas que en la Comunidad, y la tasa de rotación es ligeramente superior a la regional, de 2,83 contratos por persona.

Tampoco existen diferencias entre las demandas de los empresarios al Ecyl de hace cinco años y las de ahora: las ocupaciones más solicitadas siguen siendo las mismas y ni la crisis parece haberlas alterado. Lo que sí ha avanzado desde 2010 es la tasa de ocupación de los jóvenes menores de 25 años, que supera los datos de aquel año, con el 65,1%, casi un punto más que la nacional. La ocupación más habitual en este colectivo es la de camareros, probablemente porque muchos jóvenes encuentran una salida temporal mientras buscan otros empleos más cualificados.

En todo caso, hay que tener en cuenta que los contratos en los que intermedia el Ecyl son un porcentaje pequeño en relación con el total. Cabe preguntarse si este organismo no debería potenciar su papel de intermediación en el conjunto del mercado laboral.

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