Diario de Valladolid

PRIMARIAS EN EL PSOE

Sánchez pide "vertebrar el cambio" pero no aclara qué relación quiere con Iglesias

VEvita confirmar si se reunirá con el líder de Podemos y pospone fijar su posición hasta después del congreso del PSOE. Ofrece su primera rueda de prensa tras ocho meses rodeado por militantes aplaudiendo sus respuestas

Pedro Sánchez en un acto con militantes y rueda de prensa en Madrid.-JUAN MANUEL PRATS

Pedro Sánchez en un acto con militantes y rueda de prensa en Madrid.-JUAN MANUEL PRATS

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Iolanda Marmol

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Llegó con su chupa de cuero, desplegó su mejor sonrisa, se mostró conciliador y felicitó a los periodistas por su trabajo, pero ofreció respuestas tropicales a cada una de las preguntas que los informadores le plantearon. Pedro Sánchez llevaba ocho meses sin ofrecer ninguna rueda de prensa y ante la convocatoria, por sorpresa, este viernes en Madrid, las expectativas se dispararon. Algo trascendental tenía por decir. Con una moción de censura rondado el Congreso de los Diputados y las primarias socialistas a la vuelta de la esquina, las apuestas se dispararon. Fue en vano.

La vaguedad en las respuestas de Sánchez parecen apuntar a que el propósito de la convocatoria urgente no era hacer un anuncio importante, ni concretar cuál es su posición en temas que arden en los titulares, sino más bien apaciguar a una prensa contra la que había cargado en la víspera, se desconoce si por un calentón coyuntural o con la intención premeditada de emular a Pablo Iglesias en su afán por desprestigiar a la profesión.

Sánchez evitó en todo momento comprometer una posición clara con el jefe de los podemistas. No aclaró si se reunirá o no con él si gana las primarias el 21 de mayo. No aclaró qué tipo de relación quiere establecer con los morados. No abrió la puerta ni la cerró a posibles iniciativas conjuntas, como una nueva moción de censura, si fracasa la que Podemos ha anunciado. La de ahora, dijo, la ve "perdedora". Pero alegó que no puede fijar una posición política hasta después del congreso socialista, del 17 y 18 de junio.

"NO HAY VOLANTAZO"

La respuesta es tan legítima como desquiciante, teniendo en cuenta que hace dos meses planteó una “alianza” con Iglesias y la propuesta quedó bien descafeinada en programa definitivo que presentó este jueves. Aún así, insiste Sánchez, el “único volantazo” que ha dado el PSOE es el del pasado 1 de octubre, cuando fue relevado como secretario general y la cúpula socialista defendió la abstención en la investidura de Mariano Rajoy.

“Nosotros no hemos cambiado, hemos dicho lo de siempre, que queremos vertebrar el cambio. No renunciamos a vertebrarlo con aquellas fuerzas políticas que quieran cambiar”, sostiene. ¿En qué acción concreta se traduce lo de vertebrar el cambio? ¿En decirle que sí a Iglesias y su moción? Primero debe ganar las primarias, responde, como si le pareciese apresurada la cascada de preguntas entre las que le piden, por favor, que aclare qué propuesta concreta tiene cuando defiende la plurinacionalidad. ¿Es la misma que la de Podemos?  “Lo que decimos es que hay una única soberanía, un único Estado que tiene que reconocer el carácter plurinacional. Estamos diciendo lo mismo. No es una reflexión improvisada”, trata de explicar.

UN MINISTRO DE RAZA NEGRA

 La sala es pequeña y está abarrotada de militantes que jalean con aplausos cada una de sus respuestas, lo que convierte el acto en un mitin-rueda que cobra vida propia y termina con varios simpatizantes, micro de prensa en mano, planteando sus inquietudes, infinitamente más apasionantes que las de los informadores. “¿Si es presidente del Gobierno, va a poner a un ministro de raza negra?”.

La rueda de prensa termina tras el asalto de varios militantes sobrevenidos a periodistas. El público se le acerca para pedirle hacerse un ‘selfie’. Sánchez les atiende, cercano y paciente, y se despide de los periodistas, que siguen pestañeando tratando de dilucidar qué ha sucedido y si detrás de todo había una noticia por contar. O no.

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