Desaparecen los tres iraquís que llegaron a Guipúzcoa en un camión frigorífico
Cruz Roja sospecha que han proseguido camino hacia Gran Bretaña
Los tres jóvenes iraquís de origen kurdo que fueron hallados ocultos en un camión frigorífico en Guipúzcoa se encuentran en paradero desconocido. Cruz Rojaha desvelado que, de forma sorpresiva, han abandonado el albergue donostiarra en el que se alojaban, y sospecha que pueden haber decidido seguir su camino hacia Gran Bretaña, su destino inicial y donde al parecer tienen familia.
Estas tres personas fueron descubiertas el pasado 28 de septiembre en el interior de un remolque refrigerado que se dirigía hacia Mercamadrid. La responsable de acogida e inclusión social de Cruz Roja Guipúzcoa, Kattalin Aranguren, considera que su desaparición les hace pensar que finalmente han decidido no solicitar asilo en España, que era lo que en un principio habían comunicado. Sobre su desaparición, ha afirmado que estas situaciones "a veces suelen pasar, no es algo extraordinario".
Aranguren ha apuntado que a los tres polizones se les había recomendado solicitar asilo en Euskadi, ya que en caso de dirigirse a Reino Unido o a otro país del espacio Schengen con la misma intención, serían devueltos a España, que es el punto donde se habían iniciado los trámites.
La comunicación con estas tres personas no ha resultado sencilla puesto que hablan el dialecto orami del kurdo. De hecho, la responsable de Cruz Roja ha apuntado que "con el primer intérprete kurdo que se encontró no se entendían bien", por lo que la representación del Gobierno Regional del Kurdistan en España facilitó otro intérprete con el que se llevaron a cabo las primeras citas de orientación a través del teléfono. De hecho, para mañana estaba prevista una cita con una persona que hablaba su complicado dialecto, reunión que ahora ha quedado cancelada.
El programa marco de protección que se ha aplicado en este caso ha consistido en el ofrecimiento a estas personas de alojamiento y manutención, acordadas con el Ayuntamiento de San Sebastián. De igual forma, se les ha proporcionado un kit de higiene, una mochila, ropa para que se pudieran cambiar y clases de castellano, a las que ya habían asistido un día a una clase grupal y a otra particular para ellos. También se había puesto a su disposición un intérprete y un mediador intercultural.