Diario de Valladolid

AGRICULTURA

El valor de los cultivos ‘menores’

Futuro El alpiste, en clara expansión en Castilla y León, tritordeum, sorgo, mijo o teff son algunas alternativas para el campo con un mercado potencial / Los promotores reclaman «apoyo» para que se puedan convertir en opciones rentables

Jaime Laso, promotor del cultivo de Alpiste en Castilla y León, en una parcela situada entre Valladolid y Villalba de los Alcores.-M.C.

Jaime Laso, promotor del cultivo de Alpiste en Castilla y León, en una parcela situada entre Valladolid y Villalba de los Alcores.-M.C.

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Marisol Calleja

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Su presencia en Castilla y León apenas supera las mil hectáreas, según los datos de la PAC, concretamente 1.190 en total. El alpiste, un cultivo en expansión, el tritordeum, el sorgo, el mijo o el teff representan esas otras alternativas a los cultivos tradicionales, aunque siguen siendo todavía opciones minoritarias en la Comunidad. Se puede decir que son cereales ‘menores’, aunque con potencialidad y demanda en el mercado.

Algo que ocurre con el alpiste, un cultivo destinado a alimento para pájaros y consumo humano, que la empresa Jaime Laso lleva probando cuatro años en diferentes provincias de la región. Es más, la intención de este emprendedor palentino es multiplicar por diez las hectáreas sembradas esta campaña, y llegar así a 3.000 en la próxima siembra y hasta las 6.000, si es posible, en 2019.

Laso asegura que los resultados en campo demuestran que el alpiste se adapta «bien» al clima y tierras de Castilla y León, especialmente a aquellos terrenos «fuertes». Este año «atípico» además todo apunta, según los ensayos, que este cultivo «rústico» ha tenido un «mejor» comportamiento que los trigos y la cebada. Ahora esperan la cosecha, que comenzará hoy en algunas parcelas, para confirmar las buenas predicciones.

La realidad es que actualmente «todo el alpiste que se consume en España, unas 30.000 toneladas, se importa», fundamentalmente desde Canadá. La empresa Jaime Laso importa en estos momentos unas 6.000 toneladas. El reto, en palabras de su responsable, es «producir todo lo que importamos», y que se destina principalmente a comida de pájaros.

El precio es también un dato importante para el agricultor, ya que el contrato que se ofrece duplica por dos (2,2) el valor de la cebada. Se toma como referencia el precio de la primera semana de septiembre en la Lonja de Salamanca. Una «garantía» para Jerónimo Martín, agricultor vallisoletano del Páramo que este año ha sembrado alpiste por primera vez. Su percepción también es que el cultivo puede ser una alternativa «interesante» dentro de la diversificación. A pesar de la sequía de este año, espera sacar rendimientos entre los 2.500 y 3.000 kilos en un secano «ayudado» con algún riego, por encima de las medidas de los cereales tradicionales.

Jerónimo es un agricultor innovador, al que no le asusta probar nuevas alternativas. «Hay que diversificar en lugar de llorar», afirma convencido de que hay que probar «cosas nuevas». Su finca es un ejemplo de esa diversificación, con la presencia de nuevos cultivos.

La potencialidad del alpiste en este caso reside, no solo en su destino como alimentación para pájaros, sino también para el consumo humano especialmente, en forma de harinas, bollería, o zumo de alpiste, por el que ya apuestan algunas empresas. Eso sí, sus promotores reivindican que el alpiste entre en el seguro agrario, así como se permita utilizar las mismas materias activas que «en otras partes del mundo». Una demanda «importante» de cara a la expansión. El cultivo tiene potencial, de forma especial para la alimentación humana, que es la que puede «hacer grande» el producto.

Una máxima que puede trasladarse también al tritordeum, un cereal natural que nace de la combinación de un trigo duro y una cebada silvestre, y que sirve para una gran variedad de productos y aplicaciones innovadoras ( pan, pasta, cerveza, galletas, magdalenas, snacks...). La ventaja para el agricultor reside en este caso también en que la siembra se realiza bajo contrato, a un precio que garantiza la rentabilidad. Cecosa Semillas lleva apostando ya varias campañas por este alternativa con la «esperanza» de que en la Comunidad «se quede todo el valor añadido de este cereal». Algo que no está resultando sencillo.

«El campo sabe lo que es el tritordeum, falta conocimiento por parte del consumidor y de los elaboradores». Así lo cree Luis Fernando Oiz, director ejecutivo de Cecosa Semillas, que reclama «apoyo» a las instituciones para que se involucre «en la promoción de este producto», con unas características que no se encuentran en otros cereales. Es más digestible que el trigo, contiene hasta diez veces más luteína que el trigo común, y cuenta con una elevada proporción de fibra dietética. Este potencial les ha llevado ya a comercializar pan de tritordeum, y se plantean además apostar por la cerveza de tritordeum convencional y ecológica, un proyecto que presentarán próximamente en Valladolid. Aunque para ello, necesitan no solo al agricultor, «que demanda este cultivo», sino también a elaboradores y fabricantes comprometidos e «innovadores». Algo que «está costando más».

Cecosa ha sembrado este año unas 40 hectáreas de tritordeum, aunque saben que la apuesta de futuro dependerá de la «respuesta» en la comercialización. La empresa destaca como cada año son más los agricultores que se ponen en contacto con ellos para sembrar tritordeum en sus parcelas. Un volumen que, en estos momentos, no pueden asumir debido al stock.

La PAC obliga a diversificar y esto ha tenido su reflejo en los campos de Castilla y León, aunque al agricultor de la Comunidad «le cuesta cambiar de actividad», como reconoce Donaciano Dujo, presidente de ASAJA. «Las explotaciones están adaptadas a ciertos cultivos y la climatología no permite sembrar de todo». Aún así, el profesional es cada vez más consciente de que conviene variar para diversificar también los riesgos.

Otro cereal considerado ‘menor’ junto al alpiste y el tritordeum, con enorme potencial, es el teff, de grandes cualidades nutricionales y sin gluten. María Pérez, promotora de Salutef, empresa especializada en productos elaborados con Teff, confirma la demanda en el mercado, especialmente de harinas y copos. La empresa exporta actualmente a Japón en grano, donde el producto se adapta a las recetas tradicionales. El cultivo ha ido creciendo, aunque de forma sostenida.

No hay que olvidar que existe una necesidad mundial de aumentar la producción de cereales para cubrir la demanda mundial, de forma sostenible, lo que obliga a la búsqueda de diferentes alternativas. Opciones a las que se suma, por ejemplo, el sorgo, con 285 hectáreas en la Comunidad.

El cultivo tiene gran capacidad de adaptación, según los técnicos, y se destina tanto a la alimentación humana como animal. En Castilla y León se está promocionando también este cereal para sustituir al maíz en regadío. Es una opción «interesante» en la rotación, con un consumo menor de agua. El «problema» reside, como señala Armando Caballero, presidente de la Cooperativa Cocetra, en el precio, ya que está referenciado al maíz. Por otra parte, este profesional insiste en que, aunque el ciclo es menor (unos cien días), «desde el minuto uno se riega». Algo que dice, hay que tener en cuenta, junto al valor de la cosecha. En su caso, y a pesar de la apuesta de algunas harineras, ha decidido sustituir el sorgo por el maíz dulce.

El mijo es también otra apuesta más allá de los cereales ‘estrella’, con cerca de 2 millones de hectáreas en la Comunidad (trigo blando y cebada). La Escuela Universitaria de Ingeniería Agrícola, INEA, ha ensayado este cultivo, con importantes propiedades tradicionales, y con demanda, por ejemplo, en el mercado de productos ecológicos, aunque con «malos» resultados.

La Escuela participa actualmente en un proyecto de investigación denominado ‘ Medeltia’ para simular la agricultura del Neolítico. En este caso, cuentan con un campo en sus instalaciones donde se ha sembrado mijo y panizo para alimentación de pájaros. Abel Barrios, profesor de proyectos de investigación, destaca como la PAC interviene sin duda en el crecimiento de unos cultivos frente a otros, como ha ocurrido en el caso de las leguminosas, con un crecimiento significativo.

CULTIVOS MINORITARIOS / DATOS PAC

Sorgo: 285 hectáreas

Mijo: 104 hectáreas

Alpiste: 319 hectáreas

Tritordeum: 210 hectáreas

Teff: 269 hectáreas

Altramuz dulce: 454 hectáreas

Quinoa: 46 hectáreas

Adormidera: 1.839 hectáeras

Tabaco: 56 hectáreas

Achicoria: 53 hectáreas

Altramuz: 97 hectáreas

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